Luisma Sánchez3 min lecturaLa venta de Samu Chukwueze al Milan sembró algunas dudas en el Villarreal. Sin embargo, el submarino amarillo tenía un plan estratégico dentro de su club. A la marcha del nigeriano se le sumó la llegada de Ilias Akhomach. Tras el rendimiento del exjugador groguet, ahora el conjunto rossonero deberá abonar algunos millones más tras su traspaso. Aunque esta temporada ha servido más bien para adaptarse al Calcio italiano, en San Siro confían en su potencial.
Tal y como habría informado el periodista italiano Matteo Moretto, experto en el mercado de fichajes, el Milan pagó un total de 28 millones futbolista, de los cuales 19,5 fueron fijos y 8,5 estaban sumidos a los objetivos tanto del club como del jugador esta temporada. Todo apunta a que además, el conjunto italiano tendrá que pagar alguna que otra prima más a final de temporada por Samu Chukwueze.
De esos 8,5 millones de euros de objetivos, tres millones se deben a la presencia de Samu Chukwueze en los planes de Stefano Pioli esta temporada. De los 18 partidos que ha disputado el delantero nigeriano esta temporada, tan solo en ocho ocasiones ha sido titular. En todos esos partidos, ha contribuido con un gol y una asistencia en la Serie A, mientras que ha marcado dos goles más en la UEFA Champions League.
Además, quedan por añadir 5,5 millones de euros fijados a los objetivos del equipo. El Milan esta temporada se encuentra segundo en la Serie A, aunque muy por detrás del Inter de Milan. El scudetto lo tiene prácticamente imposible, ya que los de Simone Inzaghi le sacan una diferencia de diez puntos. Fueron eliminados en Champions League al caer en el grupo de la muerte y ahora en la Europa League se enfrentará en los cuartos de final contra la Roma.
Estos objetivos parecen estar más que definidos. Sin embargo, al final de la temporada, el Milan deberá abonar también un millón y medio de euros más en valor de primas al Villarreal. Sin duda alguna un negocio redondo, del que el submarino amarillo seguirá sacándole dinero incluso cuando acabe la temporada. De hecho, tras las ventas millonarias del submarino amarillo el verano pasado, se esperaba que montase un equipo muy sólido. Este año ha ocurrido todo lo contrario, llegando a pasar hasta tres entrenadores distintos por el banquillo groguet. Desde la llegada de Marcelino García Toral parece que las cosas se han asentado un poco.