Marc Márquez encuentra un nuevo desafío

Ganar, ganar y volver a ganar. No, no es un mantra sobre el éxito, si no que es lo que se ha acostumbrado a hacer Marc Márquez en esta temporada del mundial de MotoGP, en la que tras 12 carreras disputadas tiene en su mano el séptimo título mundial en la categoría reina. Tras tantos años en el dique seco por culpa de Honda, le ha bastado una campaña en la escuadra oficial de Ducati para poner la directa hacia la gloria y mandar con puño de hierro. También le está sirviendo para conquistar lugares donde no lo había logrado antes, y eso es precisamente lo que quiere hacer este fin de semana en Austria.

En la rueda de prensa oficial en el Red Bull Ring de Spielberg, Marc se ha centrado precisamente en eso, en el sueño estrenarse en un lugar en el que no ha ganado nunca. "No sé si voy a ser capaz, pero intentaremos ir por la victoria, aunque el objetivo es tratar de retomar el campeonato con la misma inercia positiva que tenemos en las últimas carreras". También para quitarse alguna espina que tiene clavada, ahora que está a lomos de la máquina que le quitó sus opciones de estrenarse anteriormente. "Aquí he perdido varias veces contra las motos rojas y ahora yo piloto una moto roja, así que veremos si soy capaz de ganar, aunque no es el objetivo principal".

Con el mundial encarrilado

Marc es consciente de que con 120 puntos de ventaja sobre su hermano Álex, segundo en la clasificación, significa que "al único al que se le puede escapar el campeonato" es a él, motivo por el que resalta que tendrá que controlarse a sí mismo "porque no se puede ser el más rápido en todas y cada una de las sesiones y carreras". Eso sí, su mentalidad y su carácter son iguales: "Dar el máximo cada fin de semana". Aunque para él el Red Bull Ring "es buen circuito para competir, para crear ese tipo de peleas que en el pasado era mejor", aunque reconoció que "ahora, con los dispositivos y la aerodinámica, afecta mucho cuando vas detrás de alguien, no puedes frenar en el mismo punto, pero en el pasado, vimos grandes batallas". Algo que no cree que se repita.

Sobre el título, Márquez aseguró que, a pesar de existir la probabilidad matemática en Misano Adriático, iba a ser "imposible", aunque enseguida señaló que le gustaría "tener un 'match ball' lo más pronto posible", pero evitó ponerse un objetivo o meterse presión. "Trataré de luchar por las victorias todos los fines de semana. Y al final, lo importante no será dónde, sino ganar el título".