Rossi le dice a Bagnaia cómo acabar con Márquez
El italiano no se ha cortado ni un pelo a la hora de decirle a su compatriota lo que debe evitar en su lucha diaria con el piloto español

El ascenso de Marc Márquez en Ducati y el hecho de que vaya a compartir equipo con otro campeón del mundo como es Pecco Bagnais va a traer mucho salseo en el próximo Mundial de MotoGP que arranca en menos de un mes.
Y el picante lo va a poner, quién si no, su enemigo íntimo, Valentino Rossi. Porque el italiano ya no compite pero sigue intentando aportar su granito de arena cada vez que puede para que el de Cervera no consiga igualar sus diez títulos.
Así, sin ir más lejos, le acaba de decir a su compatriota un par de consejos en su última entrevista concedida en el diario italiano Corriere della Sera: "Hay días en los que hay que ganar y días en los que hay que traer puntos a casa. Pecco nunca lo ha hecho, de lo contrario habría ganado incluso el tercer Mundia. No caigas en trampas, en juegos mentales, no te dejes condicionar por tu compañero de equipo. En los duelos, diviértete e intenta lo imposible".
Asimismo, el transalpino también ha hecho referencia a otras rivalidades que sí superó lanzándole un nuevo dardo al catalán: "Correr contra otro conlleva un odio deportivo muy fuerte. Pero cuando lo dejas, queda el respeto por quien ha compartido contigo emociones y tensiones. Con Stoner, lo mismo. Cuando vuelvo a ver a Sete Gibernau o a Jorge Lorenzo, siento placer. Oponentes que nunca han sobrepasado un cierto límite de agresividad".En este 2025 tratará de estar más presente con su equipo, el Pertamina Enduro VR46, pero su verdadera ilusión ahora es su próxima aventura en los coches, con BMW en el Mundial de Resistencia: "Cuando voy a correr busco y encuentro la misma concentración. Echo de menos a mi familia, pero sé que también necesito esa felicidad. Se trata de mejorar, de ser competitivo con los coches, que son mucho más seguros que las motos. Antes de la salida, en MotoGP, estás tenso, te enfrentas al miedo. Es un subidón de adrenalina incomparable. Además, los pilotos de coches son casi siempre gente rica que paga por correr, mientras que los de motos son fugitivos, que a lo mejor se hacen ricos corriendo".
Y para finalizar, ha recalcado la de veces que se jugó la vida pilotando: "Por la mañana me despierto, me doy cuenta de que estoy de una pieza, sano y salvo, y soy feliz. El mérito es de la suerte, pero también de la atención que pones en preservar tu cuerpo, en razonar. Recuerdo muchos momentos precisos, un adelantamiento preparado y acertado, la intención de una maniobra sin saber si saldrás de ella, el instante que desencadena un accidente".