Se le escapó al Sevilla, el Málaga lo fichó por 5 millones y ahora jugará en la 2ª de EEUU

Se le escapó al Sevilla, el Málaga lo fichó por 5 millones y ahora jugará en la 2ª de EEUU
- César Suárez
César SuárezCésar Suárez3 min lectura
Hubo un tiempo no muy lejano en el que el Málaga podía competir por fichajes contra algunos de los equipos importantes de Primera. Y no hablamos de la época Champions sino de años después, cuando se sobrevivía gracias a las ventas de los Fornals, Samu Castillejo o el ahora bético Juanmi.

El caso que nos ocupa es el de Keko Gontán. El extremo derecho, en la primera parte de la temporada 14/15, 24 añitos, brillaba con luz propia en el Eibar. El Stuttgart y el Sevilla, este por petición expresa de Unai Emery, pelearon para llevárselo en enero. Pero los armeros no quisieron negociar en el ecuador del curso y, en esa fecha, siempre remitieron a la cláusula de rescisión: 10 millones de euros, con sus impuestos, que echaron atrás a los dos pretendientes.

Fue en verano cuando bajaron sus pretensiones y, cuando parecía que los hispalenses se harían con sus servicios, apareció el Málaga para acordar su fichaje por 5 millones y quedarse a uno de los futbolistas más veloces y desequilibrantes del fútbol español... o eso parecía. La historia dice que esa operación fue una de las peores que pudo realizar el club costasoleño con un futbolista que pareció la sombra de lo que fue en Eibar.

Una vez que rescindió su contrato con el Málaga, Keko se marchó al Deportivo de la Coruña. Y con los gallegos firmó su descenso a las galeras, a la categoría de bronce. Este pasado verano, con un contrato inasumible para un Depor de nuevo en 1ª RFEF, acordó su salida. Y tras varios meses aguardando una nueva oportunidad para relanzar su carrera, ha encontrado destino en Estados Unidos.

El extremo madrileño ha sido presentado como nuevo jugador del Sacramento Republic FC, equipo fundado en 2012 y que milita en la USL Championship, en la segunda división estadounidense. Último tren en una liga poco competitiva para un Keko que, a sus 30 años, ha perdido mucho del encanto que le hizo ser una de las jóvenes promesas de nuestro fútbol.
Unete a nuestro canal de Whatsapp Únete a nuestro canal de Telegram