Alegrón brutal para el piragüismo español

¡Tremendo lo del piragüismo español! La jornada de este sábado 17 de mayo pasa ya a la historia del deporte nacional con letras de oro, y es que los palistas patrios se han lucido tanto en la Copa del Mundo que se disputa en en Szeged (Hungría) como en el Campeonato de Europa que tiene lugar en Vaires-sur-Marne (Francia). ¿Y cómo lo han hecho? A base de medallas.

Empezando por el territorio galo, tenemos que Miquel Travé se ha proclamado campeón de Europa tras acabar en primera posición la prueba de Slalom C1. El español realizó una bajada espectacular, con un segundo tramo estratosférico, para ser el más rápido en cruzar la meta. Paró el crono en 87.32 y se llevó un oro que le convierte en campeón continental. Un título europeo que no había conseguido nunca antes un español.

Con esta medalla Travé se quita la espina de la prueba matinal, ya que en la sesión matutina terminó a la puertas del podio al ser quinto en la final de la categoría de kayak. Travé, de 25 años, ya obtuvo el quinto puesto en los pasados Juegos Olímpicos de París 2024 en la prueba de C1.

¿Y qué ha pasado en la Copa del Mundo? Pues que las alegrías se han sucedido sin descanso. La madrileña María Corbera ha sido la última en sumarse a la fiesta al lograr el bronce en la final de C1 500, en la que ganó la canadiense Katie Vincent, seguida de la china Yanan Ma, ambas medallistas en París 2024, para sumar la que es ya la quinta medalla de la delegación española, en la que es la primera cita importante de la Copa del Mundo tras los Juegos Olímpicos de París 2024.

Anteriormente llegaron el oro de Sara Ouzande, Lucía Val, Estefanía Fernández y Bárbara Pardo en K4 500, la plata de Pablo Graña en C1 200 y los bronces de Carlos Arévalo en K1 200 y de María Moreno y Viktoriia Yarchevska en la C2 500.

Profundizando en la actuación de cada uno, tenemos que el cuarteto femenino español cuajó una impresionante actuación, con dominio en toda la distancia para lograr una marca de 45.75 en los primeros 250 metros y completar la prueba con un tiempo final de 1:33.80, delante de las anfitrionas, las húngaras Aliz Gombas, Emese Kohalmi, Laura Ujfalvi y Hanna Peto, ganadoras del bronce en París 2024, que emplearon 1:34.59 (a 0.79).

Pablo Graña por su parte se colgó la plata en C1 200, prueba que ganó el chino Yuebin Yu (39.12) por 12 centésimas sobre el español (39.24), y Carlos Arévalo conquistó el bronce en K1 200, igual que María Moreno y Viktoriia Yarchevska en C2 500 para obtener su primer metal en una Copa del Mundo.

Pablo Crespo, sin metal

En la final de C1 1000 masculina el pontevedrés Pablo Crespo se quedó sin podio y acabó en séptima posición (4:00.40), a 5.76 del ganador, el checo Martin Fuksa, vigente campeón olímpico de la distancia, que no dio opción a sus rivales. Fuksa hizo los tres mejores promedios del recorrido para ganar con un tiempo de 3:54.64, delante del italiano Gabriele Casadei (3:56.24) y del rumano Catalin Chirila (3:57.45), que se repartieron la plata y el bronce.