RYDER CUP

Europa destroza a Estados Unidos en la Ryder Cup pese al ambiente hostil

Pese a la única derrota vespertina de Jon Rahm, Europa se queda a sólo 2,5 puntos de traerse de nuevo la Ryder Cup

Europa destroza a Estados Unidos en la Ryder Cup pese al ambiente hostil
CIlroy Lowry celebran su triunfo. - @RyderCupEurope

Con Estados Unidos contra las cuerdas (8,5 a 3,5), la Ryder Cup 2025 revivió la lamentable imagen de hacer cuatro años. La presión aumentó, el griterío se hizo a veces insoportable y los gritos se convirtieron a veces en insultos, pero eso pareció dar fuelle a los jugadores europeos, que dejaron casi encarrilada la partida en los cuatro 'Fourballs' disputados por la tarde.

El 11,5 a 4,5 deja al equipo europeo a 2,5 puntos de los 12 que este domingo va a haber en juego. Sólo un milagro puede salvar a unos jugadores de Estados Unidos que han estado sometidos durante los dos primeros días de competición.

Liderada por un Rahm que cedió su primer partido por equipos desde que juega la Ryder y por un McIlroy que no se achantó pese a ser el más señalado por los aficionados, el equipo europeo barrió del campo a sus rivales.

Shane Lowry saca pecho por Europa

"Fue intenso, algo que nunca había vivido. Pero vivo para esto, es la razón por la que me despierto por la mañana. De verdad quiero ganar este torneo. Queda trabajo por hacer, pero tenemos que seguir y llegar a la línea de meta lo antes posible", señalaba un entusiasmado Shane Lowry.

Si por la mañana, Europa había ampliado su ventaja al ganar tres de los cuatro Foursomes, que le daba tranquilidad; por la tarde, repitió resultado en los Fourballs.

Rose y Fleetwood acaban con los números uno norteamericanos

Para colmo, dejaron tocados a sus mejores hombres. Justin Rose y Tommy Fleetwood ganaron con bastante autoridad a la dupla a priori más competitiva de Estados Unidos, la formada por Scheffler y DeChambeau (3 y 2).

Rory McIlroy y Shane Lowry también cumplieron contra Justin Thomas y Cameron Young, a los que doblegaron por dos arriba. Mientras que Tyrell Hatton y Matt Fitzpatrick ponían la puntilla ante Sam Burns y Patrick Cantlay. Sólo hubo que lamentar la mencionada derrota de Ram y Straka frente a JJ Spaun y Xander Schauffele, en un partido que parecían tener dominado y que perdieron de un golpe.

Ni eso les iba a quitar el buen gusto de saberse estar rozando el trofeo a domicilio. Les espera lo más difícil, la presión de tener tan cerca la victoria y ante unos rivales que saldrán sin presión y con el público volcado. Frenarlos en los primeros partidos puede ser clave. Si no... habrá lío.