Nuevo dorsal

Gameiro, a la sombra del 9

El francés asume el reto de lucir el dorsal con el que Negredo y Bacca sumaron 135 goles y pusieron fin a una ´maldición´ que duró 15 años.

Gameiro, a la sombra del 9
Gameiro fue el jugador que más goles anotó saliendo desde el banquillo en la 14/15. - Aitor Torvisco
Ha llegado Ciro Immobile, el club ha mostrado un fuerte interés en Roberto Soldado y Juan Muñoz pide paso a base de goles, pero el peso del significativo dorsal ´9´ recaerá sobre la espalda de Kévin Gameiro.

El francés, que en estos dos años como blanquirrojo ha llevado el ´7´, asume ahora el reto de portar el número que históricamente luce el mejor delantero de un equipo. Tras ser el jugador de Europa que más goles anotó saliendo desde el banquillo la pasada temporada y después de asumir con profesionalidad la suplencia, confía en que los 38 tantos que ha celebrado en sus 93 encuentros con el Sevilla le sirvan para hacerse con un puesto en el once titular de Unai Emery y para superar toda la presión que ello conlleva.
En primer lugar, por la enorme competencia que tendrá y, en segundo, por todo lo que implica ser el sucesor de Álvaro Negredo y Carlo Bacca, que fueron los encargados de romper una maldición que persiguió durante 15 años a los que portaban ese dorsal en el club de Eduardo Dato.

El vallecano, que hizo 85 dianas en 182 encuentros, cogió el ´9´ en su tercera y cuarta temporadas como nervionense, en las que firmó 14 y 25 tantos, respectivamente. Por su parte, el colombiano le sucedió de manera más que digna y contribuyó con 49 goles (entre ellos el doblete en Varsovia) en 108 citas.

Entre los dos marcaron 135 goles y consiguieron hacer olvidar esa maldición que nació tras la marcha de Davor Suker. El croata dejó 84 chicharros en 164 choques y el club tardó en encontrar un ´9´ de nivel. No en vano, desde su marcha en el verano de 1996 hasta que Negredo cogió ese número, pasaron con más pena que gloria 11 futbolistas.

El primero fue Carlitos, que lo lució en la 96/97 y quizás dejó los guarismos más meritorios. Tras el menudo atacante llegaron Loren del Pino (97/98), Igor Gluscevic (98/99), Marcelo Otero (00/01) y Víctor Salas (desde 2001 a 2004), cuyas participaciones fueron testimoniales. Entre medias lo lució Olivera (99/00, el año del descenso), pero sólo hasta que quedó libre el ´11´. Tampoco encontró continuidad Kerzhakov, dueño del ´9´ entre 2006 y 2008, y las lesiones asolaron a Makukula, con sólo 13 partidos de 2004 a 2006; a Koné, con 39 citas entre 2008 y 2010; y a Perotti, que lo portó en la 10/11.