Carlos Alcaraz dice adiós por presión
El murciano cayó derrotado por primera frente a Taylor Fritz en la Laver Cup y alegó que se sintió presionado por el marcador general del certamen. Fue su reestreno como número uno del mundo en un partido individual y el resultado no pudo ser peor

A Carlos Alcaraz le podría durar bastante poco su condición de número uno del mundo en el ránking ATP a juzgar por sus últimas palabras en la Laver Cup. El murciano cayó derrotado ante Taylor Fritz en 71 minutos (6-3 y 6-2) en el primer partido que disputaba de individuales con dicha corona en su cabeza. Y esta le pesó demasiado.
Aunque el de El Palmar ha manifestado que la presión que sintió fue por culpa del marcador tan adverso que tenía en ese momento el Team Europe, lo cierto es que el tenista levantino tuvo un día horroroso, como también reconoció en la rueda de prensa. Y aunque este certamen no cuenta para la clasificación mundial, muchos temen que le dure poco su nuevo estatus.
"No fue el partido que esperaba, pero debo fijarme un poco en él, porque creo que jugó un gran tenis. Simplemente no estuve tan sólido como quería en el encuentro, y estas condiciones son bastante lentas. Las pelotas son muy grandes, así que tuve que ser sólido, y no jugué ese partido hoy. Hablé con Taylor, que jugó un gran partido, muy sólido, jugando agresivo cuando pudo. Todo le salió bien, así que tuve que felicitarlo y decirle que jugó mucho mejor que yo", subrayó el reciente ganador del US Open.
En este mismo sentido, recalcó la clave de su derrota: "Él estaba más metido en pista que yo. El primer o segundo tiro del intercambio fue muy importante, y lo hizo mucho mejor que yo. Esa fue la clave, porque en estas condiciones, los primeros golpes son muy importantes. Cuando defiendes, cuando corres en la pista, es muy difícil revertir la situación. Pasar al ataque es muy complicado debido a las pelotas y a las condiciones, que son muy lentas. Fue más agresivo que yo. Hizo mucho mejor los primeros golpes que yo, y yo corría más que él".
Cuestionado por si le pesó tener que ganar por el simple hecho de ser número uno del mundo, contestó con sinceridad: "Hoy siento que tenía que ganar el punto por cómo está yendo el día, así que con las dos derrotas, siento que tenía que ganar mi partido. Fue un poco de presión extra por cómo estaba yendo la eliminatoria, pero no porque sea el número uno del mundo. El ránking es solo un número. No debería darte la presión de tener que ganarlo todo. Con las dos derrotas, sentí un poco de presión extra".
Por último, también le preguntaron por su manera de celebrar su último Grand Slam. Y Carlos Alcaraz no se cortó y contó cuál fue su plan: "Tuve cuatro días. Estuve cuatro días sin tocar la raqueta. Luego empecé un poco, a volver a jugar, a sentir la pelota. ¿Es suficiente? No lo sé, pero sí, solo me tomé cuatro días, lo que significa que uno fue justo después del partido, la final, para hacer entrevistas, fotos y todo eso, y viajar".
Con su derrota, el equipo del Resto del Mundo se puso 7-3 en el marcador y, posteriormente, acabó sumando otro triunfo más para cerrar el día con un 9-3. De esta forma y salvo un domingo perfecto, Carlos Alcaraz le dirá adiós a su primer título disputado como número uno del mundo. Y todo, "por presión".