El tobillo deja KO a Carlos Alcaraz
El tenista murciano no se ha entrenado este viernes en Tokio y frena la decisión sobre su partido anrte Bergs

Las primeras palabras de Carlos Alcaraz fueron de optimismo. Todo lo que ha venido después, no tanto. "Pude caminar hasta el banco -tras doblarse el tobillo en su debut en Japón-, lo cual para mí, fue un alivio. En este momento me siento de la misma manera, lo que para mí diría que es genial porque cuando se enfrió, me siento de la misma manera que cuando estaba jugando en la cancha. Creo que es una buena señal", aseguraba en la rueda de prensa posterior a su partido ante Sebas Báez el tenista español.
Alcaraz tenía muy claro los pasos a seguir para recuperarse de un esguince que no era tan grave como otros que había sufrido, pero alguno de estos tampoco había llegado en un momento tan delicado, justo antes de un Master 1.000 en el que se juega buena parte de sus opciones de acabar como número uno del mundo a final de temporada.
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Ante esto, dejó claro que no iba a arriesgar lo más mínimo y que el tiempo decidiría. "Este día y medio será clave para poder recuperarme. Haré todo lo posible para estar en buenas condiciones y estar listo para jugar", añadió, señalando a la mañana del viernes como clave para saber si podría jugar.
Los preedentes son optimistas con Alcaraz
De momento, no está descartado, pero, por precaución, el día intermedio antes de su partido ante Zizou Bergs no ha saltado a la pista de entrenamiento, según ha adelantado Marca. Eso ha hecho saltar las alarmas sobre un posible abandono. Aunque, por ahora, sigue en el orden de juego y el ATP de Tokio le ha dado todo el tiempo de margen para que llegue en las mejores condiciones y ha programado el partido entre Carlos Alcaraz y Zizou Bergs en el último turno del día. El tenista murciano ha estado tratándose con su fisioterapeuta Juanjo Moreno para seguir bajando la hinchazón del tobillo afectado.

Hay dos datos que hacen albergar cierto optimismo. El primero son sus palabras del viernes, señalando que el dolor no había ido a más cuando se ha enfriado y que pudo acabar bien el partido. La segunda es que, salvo en el torneo de Río de Janeiro, que tuvo una torcedura más grave durante el partido ante Tiago Monteiro que le impidió seguir, siempre ha jugado con este tipo de lesión, ya fuera en el Godó o el Mutua Open Madrid en 2022 o el US Open el pasado año. Incluso, esos dos torneos jugados en España acabó ganándolos, en Barcelona ante Pablo Carreño y frente a Alexander Zverev en la capital.
Y el único dato que pondría en duda su participación es la cercanía del Master 1.000 de Shanghai, que comienza el 1 de octubre, y en el que puede dejar casi sentenciado, si se dan los resultados, el número uno del mundo a final de temporada.
De momento ganan los factores positivos, pero hasta que Carlos Alcaraz no se levante este sábado y vea cómo se encuentra, su concurso seguirá en el aire.