Horas contadas para Peñarroya en el Barça: “Entendería que el club cambiase de entrenador”

Las palabras de Joan Peñarroya tras la derrota del Barça ante el Básquet Girona sonaban a despedida. Y salvo sorpresa, así será. El técnico blaugrana asumía la delicada situación que atraviesa el equipo culé en la Liga ACB y, al contrario que otras veces, no ponía paños calientes.

"Sé que no cuento con el beneplácito de mucha gente", decía el entrenador catalán, que lleva siendo cuestionado casi desde que llegó, que ha salvado muchos 'match ball', pero que difícilmente salvará éste. Tal es la situación que hasta los jugadores reconocen que lo normal es que salga. “Entendería que el club cambiase de entrenador por la situación que tenemos”, afirmaba este domingo uno de los pesos pesados, un Nico Laprovittola que asumía la mala situación tras salir vapuleados por el conjunto gerundense y asentarse fuera de las ocho primeras posiciones de la tabla.

El 96-78 logrado por el penúltimo clasificado de la ACB pudo haber sido incluso mayor, pero la sentencia sobre Joan Peñarroya ya estaba en el ambiente mucho antes. Tras la pañolada hacia la directiva de la sección el pasado viernes, con Joan Laporta presente, hubo una cumbre de urgencia de la que sólo salió que se iba a reforzar al equipo para no vivir situaciones como la sufrida ante el Madrid o este domingo en Girona.

Joan Laporta estuvo en la reunión y aunque el señalado en el Palau Blaugrana fue Josep Cubells, responsable de la sección de baloncesto del Barça, y no él, apoyó la medida que se fuera a tomar. Menos de 48 horas después de esa reunión ha llegado el desastre de Girona, que sitúa al Barça con un balance de dos victorias y cuatro derrotas en la ACB.

Doble cumbre y caras largas en el Barça

Tras esto, media hora de charla en el vestuario y caras muy largas. Josep Cubells, Juan Carlos Navarro y Mario Bruno Fernández, su segundo, también se reunieron por su parte. Y la noticia puede ser inminente. En el ambiente pesa también el favorito del presidente, un Xavi Pascual que está libre y que Laporta quiere al frente del equipo.

"Todos somos responsables y tenemos culpa de este momento. Cada uno vaya a su casa, lo razone y lo piense consigo mismo. Estamos dudando de todo, un montón de situaciones de juego y eso no nos hace estar con la energía habitual. Éramos de los que más reboteaban y hoy no hemos ido. Tenemos que ser responsables y hacernos cargo de esto", afirmaba el único que dio la cara, Nico Laprovittola, que fue el mejor de su equipo junto a Willy Hernangomez -uno de los habituales señalados-, pero que no fue suficiente.

Ante esto, hasta los jugadores reconocen que la medida lógica es que Joan Peñarroya salga. "No sé si es lo ideal -que echen al técnico-, pero creo que lo entendería. Estamos a bastante nivel de exigencia y, en un club como el Barça, todo puede pasar", añadía el argentino, que asumía culpas, pero entendía que cambiar de entrenador era la solución más fácil.