Antonio José Medina3 min lecturaCuarto clásico de la temporada y cuarta derrota del Barça ante el Real Madrid. En este caso, en la Euroliga, le deja provisionalmente fuera de la lucha por los 'play off', aunque con un calendario mejor que el de su eterno rival.
Como las tres anteriores, la derrota del Barça llegó por la mínima y en los últimos minutos, en los que el Madrid fue mejor y estuvo más seguro. Ya son muchas así esta temporada y aunque su técnico, Joan Peñarroya, estaba "orgulloso" de sus hombres, no dejaba de poner el dedo en la llaga una vez más.
"Otro partido disputado, igualado, que se decide al final... Es evidente que hemos hecho cosas mal, pero es un día para estar orgullosos del equipo. Hemos competido bien, hemos luchado hasta el final y hemos tenido opciones reales. Y es para estar orgullosos de cómo ha estado el equipo, pero al mismo tiempo necesitamos ser exigentes para estar mejor. Las nueve pérdidas en la segunda parte nos han castigado. Algunas situaciones tácticas sobre todo en defensa podríamos haber estado mejor", reconoce.
Peñarroya sí se iba contento con "el espíritu, la idea con la que hemos jugado, la determinación y entrando a 30 segundos con balón y opción dos abajo...". Y a su vez "jodido" porque "se escapa un partido muy igualado ante un gran rival".
"La sensación al final da igual. La realidad es que los cuatro partidos han sido muy parecidos. Seguramente, el que menos, el de Supercopa Endesa. Se han decidido en el último minuto, uno de ellos con dos prórrogas. Y los ha sabido ganar el Real Madrid", avisa el técnico catalán.
Joan Peñarroya deja dos últimos mensajes. Por un lado, que hay equipo para luchar por todo. "Podrá haber altibajos, pero hemos llega al final del partido en disposición de ganarlo, con lo cual el equipo ha competido. (...) El equipo compite. Y, si el equipo compite, va a estar ahí en la lucha tanto por entrar en 'play-in' como por los 'play off'. Nos quedan cuatro partidos en casa y tres fuera en lo que queda de Euroliga. Pero no vamos a mirar la Euroliga. El partido más importante es el del fin de semana contra el Breogán", señala.
Y, por el otro, que no está de acuerdo con las actuaciones arbitrales. "Con la técnica no estaba enfadado. Mira la estadística. Fui de los primeros sancionados en la competición -por protestar- y no tengo ganas de volver a ser sancionado", se mordía la lengua el preparador del Barça.