Se confirma lo de Joel Embiid

Si había un equipo que despertaba muchas dudas antes del arranque de la NBA ese era los Sixers de Philadelphia. La incertidumbre con respecto a Joel Embiid y la lesión de Paul George hacían y hacen dudar lo que puede ofrecer este año, donde puede ser un serio candidato al anillo si tiene todas sus estrellas sanas o darse un batacazo como el que se dio el pasado año, cuando fue uno de los peores equipos de la NBA pese a tener a estos dos jugadores y a Tyrese Maxey.

Su debut el pasado miércoles ante los Boston Celtics no disipó esas dudas, pero sí resolvió otras. La principal es que hay un nuevo elemento muy peligroso que añadir a la ecuación de estrellas del equipo de Philadelphia. VJ Edgecombe, el novato que debutaba, se fue hasta los 34 puntos, la mayor cantidad para cualquier jugador en un debut desde Wilt Chamberlain. Los Sixers ganaron (116-117) y llegarán a la próxima madrugada a su duelo ante los Charlotte Hornets con la tranquilidad de saber que no tienen la dependencia de años anteriores.

El que hasta este año pasado ha sido su gran baluarte, Joel Embiid, tan sólo jugó 20 minutos y tuvo unos números muy alejados de los que acostumbra. Cuatro puntos con un uno de nueve en tiros de campo y cero de cuatro en triples, seis rebotes y dos asistencias.

Cualquier otro partido en temporadas anteriores, con esos números del camerunés, habría sido derrota segura, pero ahora su equipo no pierde y eso es una gran noticia para sus aficionados, pero también para el propio Embiid, que quiere adoptar otro rol este año. Los Sixers ya desvelaron que iba a reservar a su estrella y, de hecho, sólo iba a jugar uno de los dos partidos en las 16 fechas de la Liga regular que tienen asignadas para disputar los encuentros llamados 'back to back' (dos días consecutivos).

Pero es que, además, el propio Embiid se ha concienciado de que no debe forzar la máquina. "Tenemos un montón de jugadores. Tienen que correr. Mi trabajo es encontrarlos y eso, en cierto modo, me salva", señalaba el africano en Philadelphia Inquirer. "Si conseguimos canastas al principio, no tengo que correr tanto. Puedo ir por detrás y entrar en ataque", añade un Joel Embiid al que su técnico, Nick Nurse, quiere llevar sano a los 'play off'. Esa es la prioridad que se ha marcado.

Es la misma paciencia que están teniendo con Paul George, al que no piensan forzar en su recuperación después de la operación de rodilla que se realizó en julio. Si tienen que sacrificar algún partido, lo harán, pero quieren a todas sus estrellas juntas y a pleno rendimiento, algo de lo que apenas pudieron disfrutar el pasado año.

VJ Edgecombe apuna a ser la solución

Por fortuna, lo bueno de tener una mala temporada es que tienes más opciones de elegir en el Draft de los primeros y este año, los 76ers eligieron en tercer lugar a uno de los jugadores más prometedores: el mencionado VJ Edgecombe.

Ante los Celtics, el joven escolta de los Sixers añadió, a sus 34 puntos (cinco triples), siete rebotes y tres asistencias y cinco triples. "Se veía cómodo ahí fuera", señaló su entrenador al final del partido sobre la tranquilidad de 'veterano' que había mostrado el de Bahamas. "Sin duda, necesitábamos sus puntos en ataque", añadía un Nurse que también tiene a Tyrese Maxey -autor de 41 puntos ante los Celtics- para liderar al equipo en este arranque de temporada. Embiid puede estar tranquilo. Su realidad ha podido cambiar, pero al fin tiene lo que lleva pidiendo desde hace tantos años, un equipo que le respalde y pueda darle un relevo.