Antonio José Medina3 min lecturaSorprendió ver en el Crypto.com Arena, en el debut de Luka Doncic con Los Angeles Lakers, a la mayor leyenda de los Dallas Mavericks. Dirk Nowitzki quiso estar presente para ver el primer encuentro de`púrpura y oro del jugador que estaba llamado a sucederle y ser el líder del equipo texano hasta su retirada.
El sueño: otro europeo que llevara a los Mavericks a un nuevo anillo de la NBA, algo que estuvieron muy cerca el pasado año, ya que alcanzaron las finales ante los Boston Celtics. Era la tercera final tras las dos que jugaron con Nowitzki al frente. La que perdieron en 2006 y la que ganaron seis años después, ambas ante los Miami Heat.
El ala-pívot alemán no ha podido ocultar la "decepción" que sufre por la marcha del esloveno. "Creo que me sorprendió tanto como a cualquiera. Realmente no podía creérmelo", asegura el internacional germano en la radio 96.7 The Ticket in Dallas, donde admite que se mostró frustrado por el traspaso. "Me sentí decepcionado y, a la vez, triste por él. No lo vi venir. Me invitó a su primer partido en Los Angeles y tenía que ir allí a apoyarle", afirmó Nowitzki sobre su presencia en el Crypto.com Arena.
No fue el mejor debut de Doncic, aunque el equipo angelino ganó. El esloveno, aún renqueante de su lesión, está yendo poco a poco y sólo en el último partido pudo sonreír tras ser el principal artífice de vengar a los Lakers ante los Nuggets, sus tradicionales verdugos de los últimos días.
En apenas unas horas se cruzará por primera vez en su carrera ante los Dallas Mavericks. Será en casa, ante su nuevo público, pero no por eso dejará de sentir nostalgia. Y a Dirk Nowitxki le recordará esa frustración a la que antes aludía. "Jugar a este deporte es lo que me encanta. Simplemente intento ser yo mismo. Por eso estaba sonriendo durante todo el partido. Creo que aún tenemos mucho que mejorar", señaló el esloveno tras ofrecer el primer buen partido en el equipo de Los Angeles. "Por fin estoy siendo yo mismo un poquito", añadía.
"Cada día jugamos un poco mejor, pero está siendo difícil para mí. Todo es distinto. Pero estoy feliz por jugar. Cada día seremos mejores. Estoy feliz por estar aquí en LA. Estoy feliz por mi nuevo camino...", admite un jugador que juró fidelidad a los Mavericks y que, poco a poco, se está haciendo a la idea que para ser campeón deberá serlo con otro equipo.