Braian y Cedrick aprovechan sus nuevas oportunidades
El congoleño terminó aclamado por su nueva afición tras una enorme actuación en la que fue el revulsivo con dos asistencias de gol; el uruguayo fue el artífice de la victoria soriana en Albacete.
Se marcharon por la puerta de atrás y ahora son indispensables en sus nuevos destinos. No es la primera vez ni la última que se da esta circunstancia, pero no deja de ser llamativa la transformación de ciertos futbolistas cuando el contexto que les rodea es realmente favorable.
Braian Rodríguez pasó medio verano esperando la llamada de algún club que se interesase por sus servicios a sabiendas de que no tendría hueco en el Betis actual.
Lo hicieron Eibar y Sabadell, pero finalmente fue el Numancia quien se hizo con su cesión. Se marchó a mediados de agosto con la certeza de que en Heliópolis no le echarían de menos. El uruguayo ha necesitado poco más de un mes para recuperar la sonrisa. En Soria está encontrando la continuidad deseada y además está respondiendo con goles. Lleva dos hasta el momento y sólo ha jugado tres partidos (contra el Betis no pudo estar por la famosa cláusula del miedo). El pasado domingo fue el artífice de la victoria de su equipo ante el Albacete (0-1) gracias a un solitario tanto que dedicó a su hija recién nacida.
Un caso similar es el de Cedrick. El congoleño encontró acomodo en Osasuna tras verse obligado a decir adiós al Betis -le sorprendió ser finalmente uno de los descartes-, y ahora vive días felices en Pamplona. El pasado domingo copó todos los titulares de las crónicas al convertirse en el revulsivo del abultado triunfo de su equipo sobre el Mallorca (6-4). Los lectores de ´Diario de Navarra´ le eligieron como el mejor del partido con un 54,5% de los votos. Su salida al campo resultó clave pues dio dos asistencias y terminó siendo aclamado por la grada. "Con su velocidad, puede venirnos bien cuando los rivales estén cansados", comentaba su compañero Nino tras el partido.
Braian Rodríguez pasó medio verano esperando la llamada de algún club que se interesase por sus servicios a sabiendas de que no tendría hueco en el Betis actual.
Lo hicieron Eibar y Sabadell, pero finalmente fue el Numancia quien se hizo con su cesión. Se marchó a mediados de agosto con la certeza de que en Heliópolis no le echarían de menos. El uruguayo ha necesitado poco más de un mes para recuperar la sonrisa. En Soria está encontrando la continuidad deseada y además está respondiendo con goles. Lleva dos hasta el momento y sólo ha jugado tres partidos (contra el Betis no pudo estar por la famosa cláusula del miedo). El pasado domingo fue el artífice de la victoria de su equipo ante el Albacete (0-1) gracias a un solitario tanto que dedicó a su hija recién nacida.
Un caso similar es el de Cedrick. El congoleño encontró acomodo en Osasuna tras verse obligado a decir adiós al Betis -le sorprendió ser finalmente uno de los descartes-, y ahora vive días felices en Pamplona. El pasado domingo copó todos los titulares de las crónicas al convertirse en el revulsivo del abultado triunfo de su equipo sobre el Mallorca (6-4). Los lectores de ´Diario de Navarra´ le eligieron como el mejor del partido con un 54,5% de los votos. Su salida al campo resultó clave pues dio dos asistencias y terminó siendo aclamado por la grada. "Con su velocidad, puede venirnos bien cuando los rivales estén cansados", comentaba su compañero Nino tras el partido.