Todo sobre el futuro de Tello: la cláusula secreta, qué desea el Betis y cómo esquivar al Barça

Todo sobre el futuro de Tello: la cláusula secreta, qué desea el Betis y cómo esquivar al Barça
- Óscar Murillo
Óscar MurilloÓscar Murillo 6 min lectura


Cristian Tello (29) está viviendo una temporada, nuevamente, irregular, fiel a su tradición. Pellegrini tardó cinco jornadas en brindarle la titularidad, a pesar de que un tanto suyo en el alargue propició el triunfo del Betis en Mendizorroza en la primera jornada de LaLiga. Entonces, el sabadellense encadenó siete partidos desde el inicio, con otros tres goles y una asistencia, pero no volvió a repetir privilegio desde el 30 de noviembre, cuando fue sustituido nada más arrancar la reanudación del duelo de ingrato recuerdo ante el Eibar. Dos meses y medio lesionado o en la reserva, actuando de revulsivo en el mejor de los casos.

Con todo, el extremo sigue siendo el segundo máximo anotador verdiblanco (4), sólo superado por Canales (7), pese a que ni siquiera alcanza los 1.000 minutos en la 20/21. Catorce compañeros han sumado más que el ex culé, a quien, pese a su bagaje y peso en el vestuario, no se le recuerda una mala cara, una voz más alta que otro ni un gesto de desaprobación. El ex de clubes tan importantes como Barcelona, Fiorentina y Oporto hace grupo, aprieta los dientes y trata de aprovechar sus oportunidades, adelantado por la derecha por Aitor Ruibal y Diego Lainez en las preferencias de Manuel Pellegrini. Aunque, obviamente, tiene la mosca detrás de la oreja.

Y es que, con 22 encuentros oficiales a sus espaldas (18 ligueros y cuatro coperos), Tello sospecha que no alcanzará el mlistón recogido en su contrato para agotar la quinta campaña de vinculación. ESTADIO Deportivo ha tenido acceso a esa cláusula desconocida que convierte el próximo ejercicio es opcional, pese a que nadie publicó en su momento, ni siquiera azulgranas y verdiblancos, que el acuerdo de traspaso (4 millones de euros por el 50% del pase) era por un póquer de campañas y una quinta condicionada.

En realidad, como ha podido contrastar este medio, tanto el Betis como el atacante pueden desligarse unilateralmente si Cristian no alcanza una cifra determinada de encuentros que, por ahora, no se rebasó. Así, el extremo quedaría libre el próximo 30 de junio de 2021 y no en 2022, como se creía, con lo que los heliopolitanos desaprovecharon ya varias oportunidades para hacer caja con él, con Krasnodar y Espanyol como frentes que estuvieron más abiertos. También en la última ventana hubo una intentona por él, deslizan desde su entorno.

El caso es que el futuro de Tello no aparece nada claro. Aparte de la citada cláusula secreta, que podría obligar a que los caminos de ambas partes se separasen, nada indica que en la planta noble del Benito Villamarín haya intención de renovarle incluso aunque cumpliese el número de partidos fijado en el acuerdo de 2017. Y eso que el jugador está muy feliz y asentado en Sevilla, hasta el punto de que no se opondría a una prolongación hasta 2023 o 2024 con unas condiciones sensiblemente inferiores a las actuales.

Encima, firmar un nuevo contrato permitiría esquivar al Barça, que, durante la vigencia del actual, se embolsaría la mitad de lo que recaudase el Betis por Tello, aunque nada de rubricarse uno nuevo. El gran problema en La Palmera no es tanto la irregularidad del extremo catalán, sino su alta ficha, difícil de encajar en los reajustes urgentes en el apartado salarial que planean para la 21/22, con alguna salida más (todas las miradas apuntan a Fekir y William Carvalho). Según confirman a ED, Cristian estaría dispuesto a 'prorratear' lo que le queda por percibir en este año y medio, por ejemplo, en un plazo mayor, lo que supondría igualmente un alivio para las arcas verdiblancas.

Entre tanto, no dejan de llamar a la puerta de su agencia, Tactic Grup, clubes pudientes para interesarse por su fichaje el próximo verano. El último, desde un país árabe, haciéndole llegar una propuesta jugosísima en lo económico, si no tanto en lo deportivo, aunque el propio Tello habría rechazado este tipo de ofertas en el pasado para enrolarse en aventuras de carácter exótico, priorizando LaLiga y, en todo caso, el fútbol europeo. No se ve, menos aún con la pandemia en pleno apogeo, fuera de su tierra. De momento, no hay movimientos en ningún sentido para aclarar el porvenir del otrora culé, si bien, al menos, ESTADIO ha puesto todas las cartas sobre la mesa.