La secta en la que podría estar inmerso Justin Bieber

La figura de Justin Bieber siempre ha sido muy controvertida, eso no es una sorpresa. Desde que comenzara su carrera en la música siendo muy pequeño, conforme fue creciendo comenzó a tener problemas con adicciones. Aunque su música también ha vivido épocas de mucho prestigio y de estar en lo más alto del panorama internacional, últimamente se mantiene en un perfil más bajo y sus actitudes preocupan mucho a sus fans, que creen que puede estar pasando un mal momento. La última de sus apariciones ha hecho saltar de nuevo las alarmas y ha generado mucha controversia. Fue en el festival de Coachella donde se le pudo ver con actitudes muy extrañas de las que muchos presupusieron que habría ingerido sustancias. Después las redes sociales se hicieran eco de dicho vídeo ha salido a la luz una entrevista de una persona muy cercana al cantante, que asegura que su situación podría ser incluso peor de lo que parece.

Una secta y una deuda millonaria

Ryan Good era hasta hace no mucho una de las personas más íntimas del cantante dentro de su círculo de trabajo. Hace un año que dejó de ser su ‘road manager’ pero hasta hace pocos días mantenía relación con él a través de la marca Drew House, la marca de ropa creada por Justin Bieber y de la que se desvinculó hace muy pocos días. Good ha dado una entrevista a TMZ donde ha asegura que el fin de su relación se habría producido por la vinculación de Bieber a una iglesia de Churchome en Beverly Hills. Churchome es una agrupación no confesional, y Good considera que es prácticamente una secta. Ellos se definen como “una comunidad global dedicada a ofrecer a todo el mundo, sin tener en cuenta su pasado o sus creencias, la oportunidad de oír la historia de Jesús”.

Especialmente en la entrevista ha dejado claro que sus malas impresiones venían por el pastor de la iglesia, Judah Smith. Este pastor es el fundador de la agrupación y que la relación de Justin Bieber con esta era desmedida. El canadiense acude cada semana, ya sea en persona o vía zoom, y llegó a incluir al pastor en el organigrama de la empresa que dirigía con Good. Esto generó muchísima desconfianza por parte del ex ‘road manager’ al tener sospechas de que estaban aprovechando la situación de Justin Bieber para ganar dinero y entrar en la empresa. Tal fue la discusión, que fue el momento en el que rompieron como equipo. Desde entonces además Good asegura que se ha ido alejando de todos los que formaban su círculo profesional, para sustituirlo por personas de la agrupación.