Sevilla firma el peor dato desde 2015, pero paradójicamente está mejor que nunca

La capital hispalense ha perdido cerca de 8.000 afiliados a la Seguridad Social, pero tiene la cifra de paro más baja desde antes de la crisis de 2008

Sevilla firma el peor dato desde 2015, pero paradójicamente está mejor que nunca
Sevilla firma el peor dato desde 2015, pero paradójicamente está mejor que nunca - Pixabay

La estacionalidad es uno de los mayores problemas que tiene el mercado laboral español. En general es muy típico ver grandes cambios en la afiliación de la Seguridad Social en función de la época del año, según si empieza o termina una época importante. Por eso por ejemplo cuando llega la Navidad se suele dar un repunte debido a las rebajas en las tiendas de ropa, o en general a los refuerzos que son necesarios para afrontar una campaña donde se hacen tantas compras. Otro de los lugares donde, lógicamente más estacionalidad se produce es en la agricultura, en las cooperativas de recogida de frutos especialmente.

Desde principios de año, sobre todo, se intensifica la recogida de todo tipo de frutas, y dura generalmente hasta mayo o junio. Sin embargo a partir de aquí se reducen las plantillas porque no hay abundancia de tantos alimentos. De manera que cuando llega el verano en general, también por otros sectores, se suele producir una caída de los afiliados. Esto ha ocurrido en Sevilla, con una enorme pérdida de casi 8.000 afiliados, pero que sin embargo no ha supuesto un aumento en el paro, sino que este incluso se ha reducido.

Una paradoja sorprendente

La provincia de Sevilla ha registrado el peor dato de junio para el empleo, desde el año 2015, con un total de 7.590 afiliados menos en la Seguridad Social. Se trata de una cifra sorprendente, siendo en su mayoría mujeres, con 5.254 frente a los 2.337 hombres. Uno de los sectores que ha contribuido a este dato negativo sin duda ha sido la educación. Durante el verano muchos de los profesores que están contratados durante el curso, se van al paro en estos casi tres meses, lo que ha provocado, junto a otros factores que se rompa la racha de cuatro meses consecutivos de aumento de afiliados. Para sorpresa de muchos la hostelería también ha sido uno de los que más bajas ha causado con más de 3.000, lo cual puede haberse visto entre otros por las extremas temperaturas de este mes de junio.

Más allá de eso, la sorpresa ha venido en la cuestión del paro. Es decir, teniendo en cuenta la pérdida y destrucción de empleo generada en este último mes, el paro, en lugar de aumentar en unas cifras semejantes, incluso se ha reducido. Concretamente el paro ha bajado en 566 personas respecto al mes de mayo. Para entenderlo cabe hablar de nuevo de sectores como la educación, en los que, aunque está en paro, sabe que para el próximo curso volverá al trabajo, de manera que ni se registra. Por otra parte, las precarias condiciones de muchos de los puestos en oferta, hace que muchos desestimen la posibilidad de buscar activamente, de manera que tampoco cuentan como personas en paro.