Alarma por una nueva estafa que suplanta a CaixaBank

Ahora que ya no se utiliza tanto el dinero en efectivo y que la mayoría de los ahorros se encuentra la mayor parte del tiempo en los bancos gracias a los pagos con tarjeta, las estafas se hacen a través de SMS. Se trata de una táctica que se denomina ‘smishing’. Básicamente consiste en un fraude bancario para el cual los estafadores suplantan la apariencia de alguna entidad bancaria para que parezca un mensaje realmente enviado por ellos. En buena medida la mayoría de usuarios que disponen de cuentas en los grandes bancos ya conocen cuando se puede tratar de algo verdadero y cuando de un intento de estafa. Sin embargo, muchas personas que no tienen tanto manejo de las nuevas tecnologías y no son conscientes de que existen este tipo de prácticas, siguen cayendo con frecuencia, lo que puede suponer pérdidas de enormes cantidades de dinero. El objetivo de estos mensajes es ese, que cliques en el enlace a raíz del cual te solicitan los datos bancarios para solucionar el supuesto problema. Es ahí cuando los estafadores tienen todo lo necesario para entrar en tu cuenta y sacar todo el dinero o al menos una buena parte de él, sin que seas consciente hasta que ya sea irremediable.

Suplantación de CaixaBank

La última gran estafa que está poniendo en jaque a muchos usuarios afecta a CaixaBank. El primer paso es, como siempre, un SMS que copia a la perfección la apariencia, e incluso el nombre o la dirección de esta entidad. El mensaje plantea que se ha realizado una transferencia desde su cuenta por valor de 3.000 euros. Ante esa suma de dinero tan alta, se plantea que si no ha sido el usuario el que la ha realizado, debe ingresar al enlace que le indica, que reza “caixaban-pagos.com”.

Ante esta situación la primera prueba que nos debe dar la pista es si en nuestra cuenta no estamos acostumbrados a tener esa cantidad de dinero, de manera que lógicamente no se ha podido hacer esa transferencia. Por otra parte, algunas de las pistas pueden ser que las oraciones estén ml construidas o que tengan faltas de ortografías. Este no es el caso, pero sí que en el mensaje se presenta como “CAIXA” y no como CaixaBank, que es el verdadero nombre del banco. Es por eso por lo que se si clica, se llegará a una página que también imita lo estético pero que realmente no guarda ninguna relación. En muchos casos incluso salta la alarma por que sea una página que no es segura. Sobre todo cabe recordar que este tipo de mensajes, nunca son reales, porque las entidades bancarias han asegurado que una comunicación así nunca llegaría por SMS.