El Barça defiende su actuación con Lamine Yamal y sostiene que informó a la Federación antes del tratamiento

El tratamiento aplicado a Lamine Yamal para aliviar las molestias derivadas de su pubalgia ha provocado un nuevo desencuentro entre el FC Barcelona y la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Sin embargo, en el club catalán aseguran haber actuado con total transparencia y en coordinación con los servicios médicos de la Selección. Desde la entidad blaugrana insisten en que su única prioridad fue proteger la salud del jugador, sin buscar ningún tipo de enfrentamiento institucional.

Según ha informado Mundo Deportivo, el Barça avisó a la Federación la noche del domingo, tras el partido ante el Celta en Vigo, de que un equipo médico externo iba a revisar al jugador al día siguiente. El objetivo era obtener una segunda valoración sobre su pubalgia, una dolencia que el joven extremo arrastra desde hace semanas y que había limitado su participación en algunos entrenamientos.

Una intervención para preservar su salud

Lo que el club no sabía en ese momento era que el doctor Ernest Schilders, reconocido especialista belga en lesiones de pubis y aductores, recomendaría realizar un tratamiento de radiofrecuencia, una técnica mínimamente invasiva destinada a aliviar el dolor y acelerar la recuperación. Una vez tomada la decisión médica, como indica el citado medio, el Barça avisó a la Federación sobre la una del mediodía del lunes, informando de la aplicación del procedimiento y del reposo de entre cuatro y cinco días que requeriría el futbolista.

El propio comunicado de la RFEF, emitido más tarde, admite haber tenido conocimiento del tratamiento antes de las dos de la tarde, aunque el informe médico definitivo no llegó hasta bien entrada la noche. La demora, explican desde el entorno del club, se debió al viaje del doctor Schilders a Londres, desde donde remitió el informe final.

Una desconvocatoria inevitable

El informe detallado indicaba finalmente un periodo de reposo de entre siete y diez días, lo que llevó a la Federación a desconvocar a Lamine Yamal para los partidos clasificatorios al Mundial de 2026 ante Georgia y Turquía. En la RFEF subrayan que la decisión se tomó pensando únicamente en la salud del jugador, evitando cualquier riesgo de recaída.

Por su parte, en el FC Barcelona se muestran tranquilos con la gestión realizada y recalcan que el proceso se llevó con rigor médico y respeto institucional. La sensación dentro del club es que se ha malinterpretado la cronología de los hechos, y que la comunicación existió desde el primer momento, incluso antes de que se realizara el procedimiento.

Reacción desde la Selección española

El seleccionador nacional, Luis de la Fuente, reconoció públicamente su sorpresa ante la situación. En declaraciones a RNE, afirmó: “Hay procedimientos que suceden al margen de la Federación. Es lo que pasa, hay que aceptarlo. No había vivido una situación así nunca. No creo que sea muy normal. Nos ha sorprendido a todos. No tienes noticias ni conoces ningún detalle, además de un tema de salud, pues uno se queda sorprendido”.

De la Fuente, en cualquier caso, evitó alimentar la polémica y quiso centrarse en el bienestar del futbolista. El técnico riojano mantiene una excelente relación con el jugador y confía en poder contar con él en las próximas convocatorias una vez esté completamente recuperado.

Mientras tanto, en la Ciutat Esportiva Joan Gamper impera la calma. Los servicios médicos siguen la evolución de Lamine Yamal con optimismo y esperan que pueda reincorporarse al trabajo progresivamente en los próximos días.