El Betis arropa a Pau López: el motivo que explica su airada reacción contra la afición del Espanyol

El Real Betis ha bajado pulsaciones con dos días de descanso antes de volver al trabajo este miércoles para empezar a preparar el duelo directo en 'Zona Champions' del sábado 18 de octubre en casa del Villarreal CF. Lo hará pendiente de recuperar al menos a cuatro de sus cinco lesionados (algo más de pausa para Isco) y sin la presencia de sus nueve internacionales. No obstante, este martes aún flota en el ambiente el tono casi épico de la victoria dominical ante el RCD Espanyol con ese polémico penalti detenido en el 90+13' por Pau López. El portero, que fue canterano y jugador del primer equipo perico, ha sido el gran protagonista en estas 48 horas y ha sido muy criticado por el gesto a la grada tras su salvadora intervención ante Javi Puado.

Mientras desde Cornellà y otros puntos de la península le han llovido palos, en la familia verdiblanca hacen piña con el meta catalán, quien además de pedir perdón con rapidez por dejarse llevar por la euforia del momento en esa airada reacción, impropia en un jugador de lo más calmado, que obviamente tiene sus motivos o, al menos, una intrahistoria que ayuda a entender un poco lo que pasaba por su cabeza en ese momento en el que los cuerpos hiperventilan y los corazones bombean sangre a su máxima capacidad.

Por si fuera poco con la euforia de decidir el partido, cabe recordar que no es la primera vez que Pau López tiene un recibimiento hostil en la que fue su casa. En el verano de 2018, el de Sant Gregori (Girona) rechazó la oferta de renovación que le presentó el RCD Espanyol y se marchó a coste cero al Real Betis, donde luego se salió, hasta el punto de debutar con la selección española y de dejar una plusvalía cercana a los 29 millones de euros en sólo un año. Ya en sus últimos partidos como perico fue silbado y el recibimiento cuando acudió como verdiblanco fue a peor. LaLiga recogió gritos de "Pau, muérete" y lindezas por el estilo en todo el choque que, además, acabó con victoria por 1-3 para los entonces pupilos de Quique Setién.

Este pasado verano, Pau López ha vuelto a fichar a coste cero por el Real Betis y el pasado domingo le tocó visitar de nuevo la que fue su casa durante 12 años, para ser protagonista una vez más. Sin ser tan hostil como el de hace siete años, el recibimiento no fue con vino y rosas. Para compensarlo ya estaban sus compañeros, que no le han dejado solo ni antes ni después de ese gesto llevándose los guantes a las orejas y desafiando con la mirada a una grada que le pitaba con fuerza.

En el vídeo compartido por el Betis se ve cómo desde el banquillo le indican dónde debía lanzarse, con especial énfasis de Álvaro Valles, su principal competidor. También Adrián San Miguel, que corrió tras el pitido final para ser el primero en abrazarle. Ricardo Rodríguez se subió a su espalda. Natan, lo mismo. Toni Doblas estaba más contento que si el penalti lo hubiese parado él. Y así todos los miembros sin excepción de la expedición verdiblanca. Incluso después del partido, con el mensaje que compartió en redes el propio portero, el vestuario se volcó con respuestas llenas de muestras de cariño. Todos con Pau López.