ENTREVISTA ED

"Como bético, siempre sufro"

Este sábado, el Betis se enfrenta a un derbi en el que los dos equipos hispalenses luchan por un puesto en Europa. Estadio Deportivo ha tenido la oportunidad de hablar con Julio Muñoz, conocido como "El Rancio", sobre cómo se viven estos días en la capital andaluza

Aunque Julio disfruta de la ingeniosidad y el humor que se respira en la ciudad durante la semana previa al derbi, como aficionado bético, también sufre y se pone nervioso. "Los derbis no se le dan bien a mi equipo, así que sufro mucho. Siempre digo que, si alguna vez me dicen, ojalá no, que me quedan solo tres días de vida, me pondría a ver derbis, porque se me hacen eternamente largos. Digo: 'Minuto 7, por Dios', y ya he perdido 20 años de vida".

A pesar del mal rato que pasa durante el partido, reconoce cómo ha cambiado la afluencia de aficionados al estadio. "Antes tenía miedo cuando iba a un derbi, pero ahora, aunque siempre hay alguien que mete la pata, no tiene nada que ver con el nivel de crispación y violencia que había en el pasado; afortunadamente, eso ha cambiado".

Para ser aficionado del Betis, se aprende una lección de frustración. "Ha habido partidos en los que decías que el equipo merecía ganar, pero al final perdió. Eso me ha formado mucho como persona y me ha enseñado a gestionar esa frustración.

El periodista trabaja actualmente en la Cadena Ser junto al humorista Juan Amodeo y el periodista Luis Márquez, quien fue galardonado la semana pasada con el premio de comunicación de la Asociación de la Prensa, en los programas "Cámara de los Balones" y "Radio No Puede Ser". Además, es profesor en el Centro Universitario EUSA. Desde 2013 hasta el Mundial de Rusia 2018, Julio trabajó para la Real Federación Española de Fútbol como director de comunicación digital, formando parte de la mejor generación de futbolistas que ha tenido España en su historia. De esa etapa, guarda muy buenos recuerdos y grandes anécdotas.

Una de ellas ocurrió cuando un tuit que publicó como "El Rancio" malinterpretado provocó que el hotel en el que se encontraba la federación fuera desalojado horas antes de anunciar la convocatoria. "Mi móvil no paraba de sonar, y le decía a Julen: "Necesito responder el teléfono", a lo que él me contestaba: "¿Qué es más importante que la convocatoria de la Selección Española?". Yo le respondía: "Es que no lo sé, si mi hijo está enfermo, eso es más importante". Al final, me metí en un lío que había provocado, porque lo que publiqué se interpretó como un ataque terrorista. Fue una de las mayores meteduras de pata que cometí como 'Rancio'. Estaba allí, con una oreja intentando hablar con la policía y con la otra intentando solucionar el problema".