Aitor Torvisco4 min lecturaPara los aficionados al fútbol sólo hay un momento que sea igual o incluso mejor que el de ver jugar al equipo de sus amores. Ese momento es el de la llamada 'previa'. Y las previas que mueve el Real Betis son famosas por diversos motivos. Unas horas antes de que el balón ruede por el césped del Benito Villamarín es un deber casi religioso el de congregarse en los alrededores. Amigos, familiares o hasta desconocidos brindando juntos por el escudo que les une se toman una copas, cantan y van fabricando de manera progresiva ese ambiente mágico que tanto se disfruta en el estadio... y que tanto se sufre fuera de él.
Y es que donde los futboleros ven fiesta, esparcimiento y buen rollo, los vecinos de Heliópolis ven cristales rotos, botellas, plásticos, suciedad y ruido. De ello se han quejado en numerosas ocasiones al Ayuntamiento de Sevilla que ha tomado nota y, según ha anunciado el alcalde, estudia ya nuevos emplazamientos para esas previas de la afición del Betis.
El alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz, confirmó el pasado jueves en el Pleno del Ayuntamiento que la "alternativa" a los macrobotellones que se producen en el Parque del Guadaíra, en el barrio de Heliópolis, los días de partido del Betis en el Benito Villamarín "apunta" a la "limitación de un espacio desocupado" donde se puedan concentrar los aficionados sin molestar. Es decir, se busca 'sede oficial' para esos encuentros en verdiblanco. Una 'Fan Zone' estable, para los más optimistas. Un botellódromo a juicio de los detractores de la idea.
No va sólo para el Betis, que eso es algo que en esta ciudad tan dual es menester recalcar. La pregunta del portavoz de Adelante Sevilla (IU-Podemos), Daniel González Rojas, se refería a los dos equipos sevillanos, reclamando que tanto Betis como Sevilla, "se involucren en la búsqueda de soluciones y "conciencien a sus aficionados" de cara a partidos como los derbis, en los que las concentraciones son especialmente multitudinarias y descontroladas.
El último ejemplo, como dan fe las imágenes colgadas en los perfiles en redes sociales de la Asociación de Vecinos Parque Vivo del Guadaíra, tuvo lugar el pasado 6 de noviembre con motivo del primer 'round' de El Gran Derbi en esta temporada 22/23. La 'previa' del Betis-Sevilla disputado en el Benito Villamarín duró cerca de cinco horas y Lipasam llegó a retirar 18.000 kilos de basura, lo que motivó la queja vecinal secundada por los defensores del Pueblo de España y de Andalucía.
El alcalde ha señalado que el espacio que se está estudiando acotar no sería "ni en el parque ni en las calles en torno al mismo". Antonio Muñoz ha mostrado su confianza en que "cuando vuelva LaLiga pueda haber cerrada una solución". En este sentido, ha recordado que "los equipos tienen que ser parte de la solución". El 31 de diciembre está previsto el próximo partido del Betis en su estadio y, coincidiendo con la celebración de la Nochevieja, los vecinos tiemblan.