Gabri Veiga regresa a Balaídos para ver en acción al Celta de Vigo

Más allá de los réditos deportivos que Claudio Giráldez está sabiendo sacarle a la cantera celeste, el Celta de Vigo ha encontrando en los futbolistas formados en A Madroa una de sus principales fuentes de ingresos. Este pasado verano fue imposible no sucumbir a la oferta del Wolverhampton por Fer López, que dejó en las arcas alrededor de 25 millones de euros. Pero la venta más cara de la historia del club gallego sigue siendo la de Gabri Veiga, que en 2023 fue contratado por el Al-Ahli a cambio de 30 millones, siendo desde entonces constantes los guiños hacia su ex equipo, del que sigue muy pendiente.

El arranque de Gabri Veiga en el Oporto

Tras dos campañas en Arabia Saudí, el de Porriño ha regresado a Europa para firmar por el Oporto, que ha pagado a su vez 15 kilos por su traspaso, dejando otro importante pellizco en la caja del Celta merced al mecanismo de solidaridad de la FIFA. En el conjunto luso comenzó siendo titular indiscutible en las tres primeras jornadas, con asistencia incluida ante el Gil Vicente. Pero tras perderse el duelo de la cuarta fecha del campeonato liguero ante el Sporting, el pasado sábado partió como suplente y dispuso de algo más de media hora ante el Nacional, viendo como el joven Rodrigo Mora, que salió en su lugar, aprovechaba la oportunidad con una destacada actuación.

El mediocentro podría verse las caras este curso con el conjunto vigués en la Europa League. Pero mientras tanto, aprovechando el día descanso concedido por su entrenador, no se lo pensó dos veces y estuvo presente el pasado domingo en el palco de Balaídos para asistir al empate a uno ante el Girona. Aprovechando que apenas hay 150 kilómetros por carretera entre una ciudad y otra, no será extraño verle en el estadio en el que dio el salto a la elite siempre que sus obligaciones en el Oporto se lo permitan.

Los guiños de Gabri Veiga al Celta

Y es que Gabri Veiga nunca ha escondido que le gustaría volver a vivir una nueva etapa con la camiseta celeste. Meses atrás, cuando tenía decidido marcharse de Arabia Saudí, incluso valoraba la posibilidad de que ese regreso fuese este mismo verano. "No sé si es más fácil o no volver si el Celta está en Europa pero todos los que lo amamos queremos que esté lo más arriba posible. Mi mayor sueño es ganar un título con el Celta y espero que un día se cumpla. No hay nada hecho pero sabéis que mi relación con el Celta es increíble. Es el club de mi vida y ojalá algún día podamos estar de la mano otra vez", señaló por entonces en la Radio Galega.

Finalmente, la oferta del conjunto luso le hizo tomar otro camino, firmando un largo contrato hasta 2030. Pero con solo 23 años, a buen seguro, habrá tiempo para que el nombre de Gabri Veiga vuelva a estar sobre la mesa en A Sede. Sus colores, desde luego, están fuera de toda duda, como volvió a demostrar este pasado domingo.