Cómo se eligen los capitanes en selecciones y clubes: tradiciones insólitas

La elección de capitanes en el mundo del fútbol tanto en los clubes como en las selecciones no se trata de un asunto baladí ni debe tomarse a la ligera, pues el portador de brazalete realiza una labor muy importante dentro del campo y también fuera de él y, habitualmente, debe reunir unos requisitos para considerarse una elección correcta.

La realidad es que cualquiera no debe ni puede asumir esta responsabilidad, pues se necesita liderazgo, experiencia, personalidad, ser popular es importante en el vestuario, estar comprometido con los colores y poseer capacidad de comunicación, tanto con los compañeros como con el árbitro durante los encuentros. Habitualmente también se valora su calidad y peso en el juego.

Por ello, elegir al capitán es una tarea importante en la que, según el equipo o la selección, se utilizan diferentes procesos y criterios, y no siempre se apuesta por las personas más idóneas o por los futbolistas que llevan más tiempo en dicho vestuario.

Forma para elegir capitán

No en vano, no resulta extraño que se realice a través de una votación, en la que entran en juego otros factores más allá de los señalados anteriormente, como las filias y las fobias entre los futbolistas, imponiéndose habitualmente el criterio de la popularidad.

Existe menos arbitrariedad cuando el encargado de elegirlos es el entrenador, conocedor a la perfección del grupo y de las virtudes de cada uno de sus jugadores, por lo que suele erigirse en una manera habitual de componer el cuadro de capitanes. También resulta habitual que intervenga el resto del cuerpo técnico para aconsejar y ayudar al míster en esta misión.

También ocurre que se opta por la rotación con el brazalete, de modo que a lo largo del curso son varios los futbolistas del plantel que ejercen de capitanes, lo que amplía el abanico, pero no contribuye en generar una referente tanto de puertas para dentro como en el terreno de juego. No es lo mismo que un jugador veterano que lleva tiempo de capitán hable con el árbitro que cada cierto tiempo lo haga uno distinto.

Elección sorprendente

Estas son las formas más habituales, pero también hay equipos donde se elige el capitán de forma sorprendente e insólita. Hay vestuarios donde han designado a sus voces autorizadas mediante un sorteo, por lo que cualquiera puede portar el brazalete, aunque, como mínimo, el elegido debe ser un habitual en los planes del técnico También se ha llegado a decidir por medio de juegos en los entrenamientos o desafíos en las concentraciones, aunque, obviamente, no es lo más recomendable.