Belotti todavía tiene pesadillas con Bono y su parada en la final de la Europa League

El pasado 31 de mayo el Sevilla Fútbol Club levantaba al cielo de Budapest la copa de la Europa League, la séptima de su historia agrandando todavía más su apabullante palmarés en la competición europea. Para ello, los de José Luis Mendilibar tuvieron que derrotar en esta ocasión a la Roma de José Mourinho, que hasta entonces contaba sus cinco finales europeas por victorias.

Y eso que la Roma se puso por delante con un gol de Dybala, pero en la segunda parte, el Sevilla empataba la final llevándola hasta la tanda de penaltis, donde emergió la figura de Yassine Bono para parar un penalti y desviar con la yema de los dedos otros, dejando en bandeja el triunfo a Gonzalo Montiel, que no erraría en su decisivo lanzamiento.

Pero casi un mes después de aquella final, la herida aún no ha cicatrizado en Roma. Y si no que le pregunten a Andrea Belotti. El delantero italiano, en una entrevista a los medios del club romano, repasó la temporada y se detuvo en la "dura y difícil" final de la Europa League. Además, Belotti todavía tiene pensamientos recurrentes con aquel balón que pudo mandar al fondo de la portería tras una rápida falta botada por la Roma pero donde se topó con la mano de Bono, que tocó lo justo la pelota para que no entrara en su portería.

"Hubiera sido una manera perfecta de redondear la temporada, pero desafortunadamente su portero hizo un gran trabajo, ni siquiera la dejó salir a córner. He imaginado cómo habrían sido las cosas si hubiera entrado el balón", admitió un Belotti que también reconoció que aquella derrota ante el Sevilla les dejó "abatidos".

Pero Belotti también se queda con cosas buenas, como su aprendizaje con Mourinho. "El reconocimiento del entrenador por mis esfuerzos ha significado mucho para mí, valoró los esfuerzos que estaba haciendo para ayudar al equipo. El abrazo que compartimos en el Olímpico cuando salí contra el Inter es algo que recordaré para siempre porque nació del amor y la sinceridad. Estaba orgulloso de mí mismo por el sacrificio que mostré y también me hizo apreciar aún más a nuestro entrenador, porque aparte de todos los trofeos que ha ganado, no hay mucha gente con la calidad humana de Mourinho".

De Mourinho dijo además que "es un ganador nato" y destacó su mentalidad. "Insiste en la importancia de tener éxito e inculca una mentalidad ganadora para cada juego. También tiene una gran relación con los jugadores. Cuando piensas que vas a dar el 100% es capaz de sacarte un 30% adicional", finalizó.