Los fichajes no responden

La temporada del Girona no está siendo la esperada. Está claro que nadie esperaba llegar al nivel de la anterior campaña en la que junto al Leverkusen de Xabi Alonso, fueron la sorpresa de Europa. Sin embargo, como mínimo, se entendía que el equipo de Michel debía ser uno de los que estuviera en la pelea por Europa. Sobre todo teniendo en cuenta que el conjunto catalán venía haciendo temporadas semejantes antes de la explosión de la 23-24. Aunque muchos de los jugadores clave que llevaron al equipo a Champions se han marchado, la estructura del equipo se ha mantenido, y hay otros tantos jugadores relevantes, que siguen a las órdenes del técnico madrileño. Pero nada más lejos de la realidad. Todavía restan 11 jornadas de competición, y con lo apretada que está La Liga, es un mundo e incluso un poco más. Sin embargo, a estas alturas, con 27 jornadas ya disputadas, el Girona mira más hacia abajo con miedo, que hacia arriba con ilusión. En este momento están más cerca del descenso que de la pelea por puestos europeos. Con 33 puntos, 7 los separan de Segunda, y 8 de Europa.

No terminan de funcionar los fichajes

Siendo un equipo humilde, el hecho de llevar a cabo una temporada a un nivel superlativo, en ocasiones puede ser incluso negativo. Negativo en tanto que el equipo pueda ser “desmantelado”. Sobre todo, porque después de la marcha de hombres importantes, la reconstrucción con perfiles que den un nivel semejante, suele ser muy complicado. En esta temporada una de las marchas más importantes que ha tenido que afrontar el conjunto de Michel es la de Artem Dovbyk. El ucraniano fue el máximo goleador del Girona con 24 dianas de las 85 totales de su equipo y que le valieron para ser el pichichi de la competición. Para tratar de suplir la marcha del ucranio, la directiva de Montilivi fichó a dos jugadores de perfiles semejantes, Abel Ruiz y Bojan Miovski.

Procedentes del SC Braga de la liga portuguesa y del Aberdeen FC de la liga escocesa respectivamente, sus fichajes suman unos 15 millones. Y ya con buena parte de la temporada jugada, prácticamente ninguno ha cumplido con las expectativas. Entre ambos delanteros solo suman 7 participaciones, 4 goles del español y 2 goles y una asistencia de Miovski. Tras el último encuentro se han dado algunas críticas especialmente hacia el Macedonio, al que le cuesta mucho asociarse con sus compañeros. Un dato demoledor que lo demuestra es que en sus 14 partidos con la camiseta del Girona, solo ha disparado en 4 ocasiones a portería. Y a esta cifra se le suman otros 4 que han ido fuera, cifras muy por debajo de lo esperado de su juego y de lo que el Girona necesita.

La respuesta estaba en casa

Esta situación se entiende mejor cuando se plantea que Cristian Stuani es el mayor goleador del conjunto gerundense. El uruguayo, con un rol secundario, se ha convertido en uno de los mejores revulsivos de Europa en cuanto a estadísticas se refiere. Después de su gol ante el Espanyol en la última jornada, el delantero sumó 5 dianas, 3 de ellos de penalti, y habiendo jugado solo un partido como titular A sus 37 años, es uno de los mejores jugadores saliendo desde el banquillo, y desde la temporada 2022-23. Desde esta temporada, suma 16 goles como refresco. Jugadores tan relevantes a nivel internacional como Lautaro y Gonçalo Ramos se encuentran por detrás suya con 11 y 9 goles respectivamente