Arte rayista en las calles de Vallecas
El bario de Vallecas se viste de franjirrojo para llevar a su equipo, el Rayo Vallecano, en volandas por Europa
Conocido es por todos el idilio que Vallecas vive con su equipo, el Rayo Vallecano. No hay Vallecas sin Rayo ni Rayo sin Vallecas. Barrio y club son uno, no entendiéndose la filosofía de la entidad sin el apoyo de sus vecinos. Un equipo hecho para y por gente obrera y humilde, como su estadio. Valores que el Rayo Vallecano tratará de enarbolar esta temporada por Europa en la Conference League.
Es por ello muy habitual el ver en Vallecas murales en sus calles en los que los vecinos tratan de plasmar su amor por el Rayo Vallecano. Arte callejera; arte obrera que hace de Vallecas un lienzo al aire libre.
El último de ellos, un nuevo mural abajo del Cerro del Tío Pío. Se trata de un mural pintado por la afición franjirroja en el que se puede ver el primer escudo que tuvo el club. Es un mural de gran tamaño que puede observarse desde lejos en la ruta del Puente de Vallecas desde el alto del Cerro. Así lo ha compartido en X, otrora Twitter, Juan Jiménez Mancha.
“Ideal la ubicación del último y espectacular mural pintado por la afición del Rayo Vallecano:abajo del Cerro del Tío Pío, a su salida, y camino del estadio; ideal para una posible ruta por Puente de Vallecas iniciada en lo alto del Cerro. El escudo es el primero que tuvo el Rayo”, destaca el usuario de X.
Una muestra más del fervor que le procesa su afición al Rayo Vallecano. Un amor por unos colores que se podrán ver, también, por otras partes del barrio.
Este mural, sin embargo, no es el único ‘regalo’ de la afición a su equipo, pudiéndose ver otras muestras. Sin ir más lejos, en las proximidades del Estadio de Vallecas se encuentra otro mural en el que puede verse a un padre llevando a hombros a su hija, ambos con la camiseta del Rayo Vallecano y bajo el cántico de “Era un día cualquiera, su padre le llevó a verte a la Albufra” y las siglas ADRV 1924.
Como estos, son decenas los murales de apoyo incondicional al Rayo Vallecano que pueden verse por las calles de Vallecas, obras, todos, de sus vecinos. Un apoyo que, por tanto, el Rayo y sus jugadores no sólo perciben desde el verde, sino que también reciben el apoyo fuera del terreno de juego. Vallecas está volcado con su equipo; Europa lo merece.