Vallecas entra en pánico

El Estadio de Vallecas vuelve a ser protagonista. Pero esta vez no por su estado, sino por su sobrecarga. El feudo del Rayo Vallecano vivirá un auténtico maratón de fútbol entre el 6 y el 12 de noviembre: tres partidos en apenas seis días. Un calendario que amenaza con castigar el recién estrenado césped, instalado durante el último parón de selecciones.

El primero de los encuentros será el 6 de noviembre ante el Lech Poznan, correspondiente a la tercera jornada de la Conference League. Tres días más tarde, el 9 de noviembre, Vallecas volverá a llenarse para recibir al Real Madrid en LaLiga. Y, como cierre, el 12 de noviembre, el Rayo B disputará en el mismo escenario su partido de Tercera RFEF ante el RSD Alcalá, por obligación federativa.

El césped, a prueba

El nuevo tapete, instalado por RoyalVerd, procede de la misma empresa que se encarga del mantenimiento de la Ciudad Deportiva del club. Se trata de un césped de tipo ryegrass, una semilla inglesa ampliamente utilizada en los estadios profesionales por su resistencia y capacidad de regeneración. Sin embargo, someterlo a tres partidos tan seguidos será una dura prueba para su durabilidad.

El único respiro para el verde llegará antes de esa intensa semana: el Rayo solo disputará un encuentro en Vallecas antes de esa fecha, el domingo 26 de octubre ante el Alavés. Ese margen permitirá que el terreno de juego llegue en buenas condiciones al inicio de noviembre. No obstante, el desgaste posterior será inevitable, y el siguiente partido del primer equipo en casa no se jugará hasta el 30 de noviembre, frente al Valencia CF.

Fortaleza franjirroja en casa

Hasta el momento, el Rayo Vallecano ha disputado cinco partidos en su estadio entre LaLiga y la Conference League, con un balance de dos victorias, dos empates y una derrota. Las victorias llegaron ante el Neman y el Shkëndija, ambos en competición europea; los empates, frente al Celta y al Barcelona; y la única derrota, ante el Sevilla (0-1).

El cambio del Rayo B

El Juez Único de Competiciones No Profesionales de la RFEF dictaminó que el partido del filial ante el RSD Alcalá debía jugarse en Vallecas. La causa: ninguno de los campos 3 o 4 de la Ciudad Deportiva superó la inspección del Departamento de Competición. Así, el Rayo B se verá obligado a mudarse temporalmente al estadio principal, sumándose a la intensa actividad que vivirá el feudo franjirrojo en una sola semana.