El gesto de Iván Alejo con Diego Hormigo que termina con lío y en una surrealista expulsión

El Granada no termina de remontar el vuelo y justo cunado tenía a tiro el salir del descenso se topó con un Valladolid que vuelve a sumar tres puntos después del disgusto en la Copa del Rey. Los de Guillermo Almada vuelven a apretar la zona de alta de la clasificación situándose a tan solo un punto de los puestos de play off. La victoria de los pucelanos finalizó con 2-1 y vuelve a dejar bastante tocado al conjunto nazarí. Como viene siendo habitual últimamente en LaLiga Hypermotion, la polémica no estuvo exenta en ese encuentro ya que Iván Alejo con su gestó, provocó a un jugador rival, Diego Hormigo y este acabó siendo expulsado.

La expulsión de Diego Hormigo

Al margen del juego, el Valladolid jugó otras cartas a través de Iván Alejo y ya sea de forma intencionada o no, el jugador acabó favoreciendo a los blanquivioletas con su gesto hacia el jugador rival. Este consistió en un beso en la frente, el cual desembocó en una de las expulsiones más surrealistas que se recuerdan.

El contexto del partido era de que el Valladolid había remontado el gol inicial del Granada y fue en los minutos finales donde el extremo ex del Cádiz jugó con la frustración del rival. En los minutos finales, cuando el encuentro estaba lo más abierto posible es cuando sucedió la acción entre ambos jugadores. Al defender el resultado en el tiempo de prolongación, se dio lugar un encontronazo que finalizó con el mencionado beso en la frente que no hizo más que desatar la ira del ex jugador del Sevilla. Hormigo le respondió al instante con un golpe con un brazo que le costó la cartulina roja. El árbitro explicó en el acta que expulsó al jugador del Granada "por golpear con el brazo en el cuello de un rival con uso de fuerza excesiva, no estando el balón a distancia de ser jugado".

Las declaraciones de Iván Alejo

Tras el encuentro, tuvo palabras en Ser debido a su acción, la cual llamó la atención a nivel futbolístico. En primer lugar quiso tirar de ironía sobre la acción con la que quitó algo de tensión al asunto. "Es que soy muy cariñoso, me lo dicen siempre mis amigos". Tras estas palabras continuó sus declaraciones aclarando el origen de la toma de esta decisión. "Veníamos un poco picados de una jugada anterior y sabía que el estaba al límite y que en cualquier momento iba a saltar".

El jugador finalizó este tema con su decisión afirmando que la astucia juega un papel importante. "Entonces, le he dado un beso y el me ha soltado la mano. Creo que el fútbol es para listos y no para tontos. Hay que saber aprovechar todo, es una expulsión muy clara".