El idilio con Vallecas permite un arranque para soñar con lo de antaño

Recuerda el querido Fran Martínez (@LaLigaenDirecto) que Vallecas es el segundo estadio que mejor (en lo que a más continuo se refiere) se le ha dado al Sevilla FC en su historia. Ya son diez visitas consecutivas sin perder a la casa del Rayo Vallecano, este domingo también con apoyo pese a las restricciones, por delante de las nueve que encadenó al Benito Villamarín de su eterno rival, el Real Betis, entre 2007 y 2018, sólo por detrás de las once invicto en Son Moix frente al RCD Mallorca entre 2002 y 2011. Una dinámica que propicia que los de Matías Almeyda encadenen tres desplazamientos venciendo (en Montilivi al Girona FC; en Mendizorroza al Deportivo Alavés y este domingo) desde su tropiezo inaugural en San Mamés con el Athletic Club y eleven a 10 puntos sus réditos, contando la unidad salvada 'in extremis' por 'Peque' Fernández frente al Elche CF en casa, donde ha perdido contra Getafe CF y Villarreal CF.

Lo del Ramón Sánchez-Pizjuán empieza a preocupar un poco, ya que las tres comparecencias de este curso se han saldado sin triunfos y, contando los últimos encuentros de la 24/25, aparece una sola victoria (la que prácticamente selló la salvación frente a la UD Las Palmas con tanto de Álvaro García Pascual) en trece compromisos. Las penas, eso sí, son menos con el pan foráneo, que brindará a los blanquirrojos el regalo de terminar la séptima fecha en una posición holgada de la clasificación de Primera división, bastante más cerca de Europa (dos puntos) que del descenso (a cinco). Y claro que hay muchas cosas que mejorar, pues no siempre valdrá con un tiro a puerta para sumar de tres, aunque ganar solidez defensiva, ser eficaces arriba y solidarios en la entrega son argumentos que combinan bien en pos de la ansiada regularidad.

El citado perfil especializado, además, apunta que el Sevilla FC no empezaba tan bien el curso liguero desde la temporada 21/22, la última con premio continental. Por aquel entonces, los de Julen Lopetegui perdían en Granada después de seis jornadas iniciales muy buenas, con cuatro victorias y dos empates, lo que se tradujo en 14 puntos. A final de ese ejercicio, una cuarta plaza que dio derecho a jugar la Champions League. Interesante precedente, pues en la 22/23, con excepción hecha del título en Budapest de la séptima Europa League, se iniciaría un declive que mandó a los nervionenses a luchar siempre hasta la fecha por eludir el descenso (paulatinamente, con menor margen) y a conformarse con ver entre semana los encuentros continentales de otros conjuntos de LaLiga.