Fernando Ruiz3 min lecturaLa primera plantilla del Sevilla logró el pasado sábado por un cómodo triunfo en esta temporada en LaLiga. Ante el Elche, el conjunto de Sampaoli dejó sentenciado el encuentro antes del descanso con los dos goles de En-Nesyri y otro de Acuña, para en la segunda parte dosificar esfuerzos tras el desgaste de la Copa del Rey. Por ello, Jorge Sampaoli ha dado dos días de descanso a su plantilla, que volverá al trabajo en la mañana de este martes ya muy posiblemente con la novedad de Pape Gueye, que en la mañana de hoy ha pasado el reconocimiento médico, y a la espera de Bryan Gil, que podría volar hoy a Sevilla.
Y es que, como decimos, por fin la afición del Sevilla pudo disfrutar de un partido en casa sin los nervios de llegar a los últimos minutos jugándose los tres puntos. Una jornada más, los medios oficiales del Sevilla Fútbol Club nos enseñan su particular visión del Sevilla-Elche desde dentro, donde nos deja ver como la plantilla baja del autobús para entrar al vestuario en un silencio sepulcral, sin la música que muchas veces ambienta la previa del partido, con caras de concentración a sabiendas de la importancia del partido que afrontaban.
"Estamos preparados", decía Joan Jordán sonriendo a la cámara mientras conversaba con Rafa Mir desde el banquillo, ambos fueron suplentes en esta ocasión. Las fotos de Ocampos y el Papu Gómez con los seguidores más pequeños y las clásicas firmas de autógrafos para los niños que se acercan al banquillo del Sevilla antes de que comience el espectáculo.
Ahí también pudimos ver la visita de José Ángel Carmona a los que hasta hace poco han sido sus compañeros, acercándose el canterano ahora cedido en el Elche hasta final de temporada para saludar y charlar un rato en la previa.
Todo empezaba a coger ritmo ya con los jugadores del Sevilla en el túnel de vestuarios. Las consignas claras con Óliver Torres e Ivan Rakitic. "Que ellos digan aquí no hay nada que hacer", espetaba el extremeño. "Si la perdemos, vamos rápido a recuperar", indicaba el croata.
Los tres goles, muy celebrados en el banquillo del Sevilla sin Sampaoli y las caras de alivio y satisfacción, con algo de rabia, tras el partido ya en el vestuario. Felicitaciones, ya con Sampaoli entre los integrantes aunque con la nota preocupante de la lesión de Jesús Navas, al que se le pudo ver con un semblante más serio a la espera de unas pruebas que arrojen luz sobre su periodo de baja.