Monchi y Del Nido eran 'ateos', pero ahora creen

"Sería muy osado juzgar el trabajo de un profesional en el Sevilla o en el Betis. No es mi misión actualmente. Hablar ahora de si va bien o mal no tiene mucho sentido, porque podemos emitir un juicio que no sea acorde a la realidad final. Los balances se hacen a final de temporada. Entonces se valorará lo que ha hecho Pimienta, si ha sido positivo o no. Lo único que le deseo como sevillista es que consiga los mayores éxitos posibles. Eso sería bueno para todos los que consideramos el sevillismo como una parte de nuestra vida", apuntaba Monchi en marzo pasado. Antes, siempre con su amor por los colores blanquirrojos por bandera, pasaba palabra o se mordía la lengua, según el momento, para no quedar mal con quienes trabajó codo con codo, por mucho que le doliera cómo tramitaron su salida de Nervión. En el caso de José María del Nido Benavente, sus ataques al consejo que preside su primogénito incluyeron también a planificadores como Víctor Orta, si bien consideró casi siempre lo uno consecuencia de lo otro.

Eran, en mayor o menor medida, 'ateos', pero, parafraseando a C. Tangana y Nathy Peluso, ahora creen. Al menos, en Matías Almeyda y Antonio Cordón, verdaderos artífices de una resurrección deportiva por la que pocos apostaban y que se materializó justo antes del parón de selecciones con una goleada al FC Barcelona que sirve para romper tres gafes de una tacada. El isleño, en pleno debate sobre su posible regreso, volvió a alabar en 'Gol a Gol' de Canal Sur TV a su segundo sucesor y al míster elegido: "Sí que es verdad que es un entrenador que siempre está en el radar, porque venía triunfando. Una vez que da el salto a Europa, su doblete en Grecia, ganando Liga y Copa, hace pensar que evidentemente hay algo. Es un entrenador ganador; donde ha estado, lo ha hecho". Unos días antes, durante un acto con el San Fernando, apuntaba que el de Granja de Torrehermosa es "de los mejores en el mundo de la dirección deportiva".

Abordado a la salida del Ramón Sánchez-Pizjuán por los compañeros de 'Zona Mixta' tras el encuentro ante el Barça, que aprovechó para "saludar y dar un abrazo, como corresponde", a su amigo Juan Laporta (ya censuró en su momento el enfrentamiento público y la ruptura de relaciones con los azulgranas de su hijo), José María del Nido Benavente admitía que está "contentísimo" con el momento deportivo que viven los blanquirrojos: "Como para no creer en este equipo". Dos adeptos importantes en la carrera por normalizar una situación que, dejando lo societario a un lado, debe valer para restaurar una comunión en 'La Bombonera' ideal para volver por los fueros de no hace tanto.