Sevilla FC 4-1 FC Barcelona: Los sueños se vuelven a hacer realidad

El Sevilla FC hizo el imposible en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Con un FC Barcelona que aterrizaba a Sevilla como uno de los equipos más en forma de toda la competición doméstica, vio como acabó siendo superado por un equipo sevillista que supo dominarle en la primera parte y conseguir una ventaja de hasta dos goles gracias a los tantos de Alexis Sánchez e Isaac Romero. A pesar del acercamiento culé con el tanto de Rashford, el cuadro sevillista hizo un ejemplo de resiliencia defensiva donde la suerte y el buen trabajo se acabaron alineando para que José Ángel Carmona y Akor Adams aumentasen la ventaja y el equipo hispalense sumase sus primeros tres puntos en casa.

Si hubiese guiones que firmase la afición del Sevilla FC al principio del encuentro, sin lugar a duda hubiesen firmado este. Tal y como se esperaba, y muy fiel a su estilo, el equipo dirigido por Matías Almeyda fue en tromba en busca de la portería de Hansi Flick. En algún caso, mucho más de lo que se podía intuir. el conjunto sevillista fue totalmente el dominador de los primeros minutos, de hecho, es que solo hubo un color en el césped del Ramón Sánchez-Pizjuán. Los sevillistas supieron aprovecharse de esa defensa adelantada que propone el cuadro catalán y las bandas fueron el principal foco ofensivo del conjunto hispalense. Las acometidas de Suazo eran constantes y el Sevilla llegaba con mucha facilidad a los dominios culés. Las aproximaciones fueron muy peligrosas, y acabó llegando una de las principales polémicas de este encuentro.

En un saque de banda, que parecía rehuir de todo peligro, Isaac Romero se batió con Ronald Araújo en un duelo en el área, lo que acabó provocando la caída del delantero lebrijano. Ni las protestas del colegiado ni la reacción del lebrijano hacían pensar que pudiese dar para algo más, sin embargo, la llamada desde el VAR fue clave para que se acabase señalando la pena máxima. El contacto fue claro abajo del canterano sevillista y no pareció haber mucho debate posterior. El encargado de tirar ese penalti fue uno de los protagonistas de esta semana, como Alexis Sánchez. El chileno se enfrentaba a uno de sus antiguos equipos, pero eso no fue impedimento para batir a Szczesny y celebrar con rabia su primer tanto en Nervión.

El ambiente era el de los grandes días en el feudo nervionense, con la afición y el equipo conjuntados en su máxima expresión. Unos minutos de mayor insistencia blaugrana fueron los únicos contabilizados por el conjunto de Hansi Flick, que estuvo a merced de su rival en los primeros compases. Carmona tuvo la suya, al igual que un Isaac Romero que tuvo tres muy claras. No parecía ser el día del delantero lebrijano, que vio como tres ocasiones donde prácticamente tenía que empujar fueron muy lejos de su objetivo.

Sin embargo, en un partido donde todo le estaba saliendo al equipo local, hasta fue el momento de Isaac Romero de romper esa mala racha. En una de esas llegadas laterales hispalenses, que prácticamente se plantaba solo en la zona de tres cuartos, Vargas le puso el balón en bandeja a Isaac para que doblase la ventaja en el electrónico. La incredulidad en la afición era evidente, ni el más optimista era capaz de pensar en un dominio tan evidente en todas las parcelas del terreno de juego. Y así lo demostró el equipo en la celebración de ese segundo tanto, todos unidos y con esa garra característica de Almeyda.

Tras ese gol pareció despertar el equipo visitante, algo esperado sabiendo de la entidad del mismo. Sin embargo, la defensa sevillista se estaba mostrando férrea y apenas estaba concediendo. Sin embargo, todo lo bueno mostrado en cuarenta y cinco minutos, pareció empezar a deshacerse en uno. En el descuento, previo añadido del añadido, ocurrió uno de los pocos errores hechos por el Sevilla FC en la primera parte. Lucien Agoumé pierde el balón en el intento de despeje y ahí, el cuadro hispalense deja el balón a Pedri, que únicamente tuvo que ponerla con gracia al interior del área. Rashford se encontró ese balón y, sin oposición alguna, consiguió acercar al cuadro blaugrana al encuentro. Con enfado en las gradas, al no entender esa decisión del colegiado, ambos equipos se metieron en el túnel de vestuarios con ventaja para los locales.

El regreso tras el descanso fue el esperado dentro del guion del encuentro. El FC Barcelona, poco a poco, empezó a asomarse con más peligro a la meta defendida por Odysseas Vlachodimos. No con mucho realizado, pero sí con una mayor insistencia por parte del equipo catalán. Sin embargo, no parecía haber mucho más, todo esto con un Sevilla FC que se mostraba férreo en esas labores defensivas. Pedri fue el encargado de tener la más clara para el equipo de Barcelona, pero el portero griego fue el encargado de desviar ese disparo. Todo parecía estar encajando en el plan de Almeyda, que dio entrada a Nemanja Gudelj con un mayor pensamiento defensivo. A pesar de la creatividad del centro del campo culé, que acumuló la posesión en la segunda mitad, la presión parecía hacer imposible cualquier acercamiento que respirase cierto peligro.

Y, en todo este barullo, volvió a ocurrir casi un imposible. El protagonista de la semana, y uno de los más aclamados por la afición, como era Adnan Januzaj, tuvo un ingreso difícil en el terreno de juego. De hecho, en su primera jugada acabó provocando un claro penalti en área sevillista. Todo parecía caerse, con un plan de Almeyda que estaba funcionando. Lewandowski acechaba el punto de penalti, por lo que el empate era lo más esperado en este caso. Sin embargo, cuando todo parece querer salir, sale. Y eso le volvió a pasar al equipo hispalense, que vio como el polaco mandaba directamente fuera la pena máxima. La suerte parecía alinearse con el conjunto sevillano, que volvió a saborearla en una acción donde Roony estaba solo y la mandó a las manos de Vlachodimos.

Todo parecía condenado a que se acabase esa racha, el Sevilla FC seguía haciendo un gran trabajo para salvar las acometidas catalanas. Vlachodimos se erigió como el salvador de un equipo que estaba funcionando a las mil maravillas, dejando prácticamente sin opciones al cuadro barcelonés. Tanto se acabó dando esa suerte que, todo empezó a tener esa aura ganadora. Con una afición que apretaba, el conjunto hispalense fue en busca una vez más de la portería culúe. Y eso empezó con una jugada que tuvo a Akor Adams y a José Ángel Carmona como protagonistas. El canterano parecía que iba a buscar el centro al nigeriano, sin embargo, decidió tirar a puerta. Y, cuando todo sale, todo sale. El balón acabó entrando en la meta defendida por el portero polaco, desatando la locura en las gradas del Sánchez-Pizjuán. La racha se iba a romper, en un encuentro muy completo del cuadro dirigido por Matías Almeyda.

La cosa no se quedó ahí, la alegría siguió. La conexión nigeriana funcionó una vez más, cuando Chidera Ejuke encaró el área defendida culé para servirle el gol en bandeja a Akor Adams y poner el cuarto y definitivo gol del encuentro. Cuando pitó el colegiado, todo fue un estallido de alegría. El Sevilla FC había conseguido romper la racha de la mejor manera posible, contra uno de los mejores equipos del mundo y endosándole cuatro goles.

Ficha técnica

Sevilla FC: Odysseas; Carmona, Azpilicueta, Marcao, Suazo; Batista Mendy (Peque 71'), Agoumé, Sow (Nemanja Gudelj 63'); Alexis, Vargas (Januzaj 71') e Isaac (Akor Adams 63')

FC Barcelona: Szczesny; Koundé, Araújo (Eric García, 45'), Cubarsí, Gerard Martín (Alejandro Balde, 45'); Pedri, De Jong, Olmo; Rashford, Ferran (Roony 69') y Lewandowski

Goles: 1-0 (13') Alexis Sánchez (P); 2-0 (36') Isaac Romero; 2-1 (45'+7) Rashford; 3-1 (90') José Ángel Carmona; 4-1 (90'+4) Akor Adams

Árbitro: Alejandro Muñiz (colegio gallego) dirige el encuentro sobre el césped; Carlos del Cerro (colegio madrileño) en la sala VOR. Amarillas para Gerard Martín, Marcao, Ferrán Torres, Frenkie De Jong, Isaac Romero, Januzaj, Agoumé, Rashford, Peque, Akor Adams y Gudelj.

Incidencias: Partido correspondiente a la 8ª Jornada de LaLiga EA Sports disputado en el Ramón Sánchez-Pizjuán con 41.040 espectadores.