Morata 'tacha' al Getafe, pero no al Sevilla: "Cómo voy a descartarlo si es un grandísimo club"

Extraña ciertamente el rumor surgido el pasado fin de semana en Turquía acerca del interés del Sevilla FC por repatriar a Álvaro Morata. El delantero madrileño, concentrado actualmente con la selección española de la que es capitán para la 'final four' de la Nations League, tiene 32 años y cumplirá 33 el próximo mes de octubre, amén de cobrar seis millones de euros durante su opción con opción de compra por parte del Milan en el Galatasaray, que puede prorrogarla más allá del 20 de enero de 2026 y adquirir su pase dos cursos más por ocho millones, que serían nueve si decide ejecutarla en ese verano, más los seis que ya ha abonado a los 'rossoneri'. En realidad, el otrora merengue y colchonero "diría que el Getafe CF" será su próximo equipo en LaLiga, donde desea volver pronto, pues se formó inicialmente en la cantera azulona y le gustaría hacerlo a modo de retirada.

No obstante, de manera bastante paradójica, el ariete pospuso su hipotético retorno al Coliseum, pero no tachó de la lista a los nervionenses, aunque parece más un asunto de respeto: "Tengo seis meses más de contrato con el 'Galata', pero no sé lo que va a pasar. Voy a hacer todo lo que pueda por jugar en el Getafe, pero no es ahora el tiempo de hacerlo. (Lo del Sevilla FC) no es verdad, al menos que yo sepa. Pero es un grandísimo club, así que cómo voy a descartarlo yo. ¿Que si me gustaría jugar algún día ahí? Hombre, es un gran club, claro". Sorprendentes declaraciones a 'El Chiringuito de Jugones', que bromeaba con él acerca de lo que le diría Ángel Torres si cambia su equipo por el nervionense, las este lunes desde el 'stage' de 'La Roja' en Las Rozas, donde reiteró sus planes de futuro: "Claro que me gustaría volver a España. Elegiré lo que más feliz haga a mi familia".

Sea como fuere, el de Morata no es un nombre ahora mismo sobre la mesa blanquirroja, más allá de que será una decisión que competa tanto al nuevo director deportivo, con muchas opciones para Antonio Cordón en sustitución de Víctor Orta, como al entrenador que supla a Joaquín Caparrós, asunto éste algo más enquistado al no estar ni mucho menos convencido Imanol Alguacil, el elegido a día de hoy, con José Bordalás y Vicente Moreno en la recámara. Con todo, la encomienda sin ingresos europeos y con un bajón en los televisivos seguirá siendo reducir la masa salarial y apostar con jóvenes valores que puedan revalorizarse, apartado en el que no entra precisamente el madrileño, más allá del altísimo coste que supondría para las depauperadas arcas sevillistas.