Rajada contra el Sevilla, Del Nido y Monchi: "Me faltaron al respeto"

Le tocó hacer frente a una etapa de transición en Nervión y cree que firmó una temporada "muy digna", pero le dolió que el club contactase con otro técnico antes de comunicarle a él que no seguiría

Rajada contra el Sevilla, Del Nido y Monchi: "Me faltaron al respeto"
José María del Nido Benavente y Monchi, en su etapa en el Sevilla FC. - CORDON PRESS

Atraviesa el Sevilla FC por una delicada situación económica e institucional que se refleja, obviamente, en el plano deportivo. Fuera de Europa por segunda vez en las últimas 20 temporadas, los aficionados más jóvenes no recordaban a un conjunto nervionense en horas tan bajas. Pero lo cierto es que también hubo otros tiempos difíciles por el camino, como fue la transición entre aquel equipo de Juande Ramos que ganó las dos primeras Copas de la UEFA y el que año después dirigió Unai Emery e hizo triplete en la Europa League. ENtre medias, Antonio Álvarez levantó la Copa del Rey en 2010, pero ya por entonces había comenzando una caída que Gregorio Manzano logró sostener tras la destitución del técnico marchenero en los albores de la 10/11,

"La campaña anterior, con el Mallorca, perdimos la Champions en la última jornada por el famoso gol de Rodri en Almería. Paradójicamente yo no comienzo la temporada por diversos motivos y al final me acaba llamando el Sevilla cuando ya había comenzado la temporada con la eliminación en la previa de Champions (ante el Sporting de Braga). Ya había empezado también la Europa League con derrota ante el PSG. El comienzo no fue positivo y Del Nido me llamó tras perder ante el Hércules. Había llegado a un acuerdo con mi representante y al día siguiente hice la maleta y me vine para Sevilla, sin pretemporada ni preparación", ha recordado el preparador jiennense en El Pelotazo de Canal Sur Radio sobre su desembarco en Nervión en ese delicado momento.

Bandos en el vestuario

Finalmente, aquel Sevilla FC logró acabar quinto en LaLiga y alcanzó las semifinales de la Copa del Rey ante el Real Madrid, cayendo no sin polémica ante el Real Madrid. Pero Manzano no esconde que había un ambiente extraño en el plantel, del cual se decía que estaba dividido en bandos. "Ya ha prescrito, por eso puedo contar que en su momento le dije a Monchi que por qué no me avisó de todo lo que pasaba en el vestuario. Monchi me respondió que si me lo contaba no iba a querer venir. Con eso se resume una situación difícil. Había jugadores que habían logrado los mayores éxitos en la historia del club y era una etapa de transición", confesó.

Los contactos del Sevilla con Marcelo Bielsa

Pero lo que más le dolió al que fuese también entrenador de Atlético de Madrid, Málaga, Mallorca, Rayo Vallecano o Racing de Santander fueros las formas en las que el club gestionó su salida, tocando a posibles sustitutos antes de que finalizara el curso. "Mi idea era trabajar por un año y si al fina de la temporada las dos partes estábamos contentas, seguiríamos. No íbamos a hipotecarnos ninguna de las dos partes. Creo que fue una campaña muy digna, pero hubo un momento en el que no sé por qué motivo, lo desconozco, veo una noticia en la que el Sevilla se había puesto en contacto con Bielsa. Yo voy de cara por la vida y si alguien no lo hace conmigo me afecta. Me fui a ver a Monchi y le pregunté a la cara si era cierto. Me lo negó categóricamente y le comenté que el tiempo daría o quitaría razones, pero que no era el mejor camino para terminar la temporada. Yo respeté al club y a mi no me respetaron", destacó.

Finalmente, quien llegó fue Marcelino. Pero Manzano no tiene dudas de que hubo contactos con el argentino. "Totalmente", zanjó al respecto, insistiendo en esa fea salida de un equipo hacia el que sólo tiene buenas palabras pese a todo. "Llevo al Sevilla en mi corazón, pero hubo una falta de respeto. Después de ese duro pero bonito trabajo que tuve que hacer, no tuvieron ese respeto hacia mi persona. Cuando regresamos del último partido ante el Espanyol, Del Nido y Monchi me invitaron a comer para hablar de la temporada y no me dieron opción de que me dijeran nada. Entrenar al Sevilla, como andaluz, era una gran ilusión. Al presidente le di las gracias por la oportunidad, le deseé buena suerte para el futuro y le pedí poder despedirme en rueda de prensa de la afición", sentenció.