En su delicada situación económica, con el límite salarial por los suelos, el Sevilla FC celebra cualquier ingreso extra, por pequeño sea. Así, en Nervión están muy pendientes de todos los movimientos que afectan a jugadores que han pasado por sus filas, especialmente por su cantera. No en vano, cualquier futbolista que haya pertenecido a la disciplina blanquirroja hasta los 23 años es susceptible de generar una ganancia si protagoniza un traspaso internacional.
Además, en el Sánchez-Pizjuán fueron pioneros en este sentido, creando una herramienta tecnológica que fue adquirida por LaLiga. Con Monchi al frente de la dirección deportiva, vio la luz Transfer Tracker, un servicio que facilita la labor de los clubes para reclamar los derechos de formación que la FIFA estipula, pudiendo alcanzar el 5% del total de la venta si el futbolista en cuestión ha militado en el equipo reclamante entre los 12 y los 23 años. No siempre estos movimientos son sencillos de detectar. De hecho, se estima que el 30% del dinero que genera el citado mecanismo de solidaridad se quedaba sin reclamar, pero esta aplicación web vino a solucionar dicho problema.
En su momento, uno de los nombres que se puso como ejemplo para poner en valor esta herramienta fue el de Jorge Carrascal, centrocampista colombiano que militó en el Sevilla Atlético durante la temporada 16/17. La apuesta para firmarlo del Millonarios de su país fue importante, pues se abonaron 900.000 euros. Pero una grave lesión de menisco sólo le permitió jugar un partido con el filial en Segunda división. A ello se unieron varios episodios de indisciplina que hicieron que al verano siguiente se marchase cedido al Karpaty, que lo acabó adquiriendo por dos millones.
Su revalorización en Ucrania le llevó a ser protagonista de una serie de cesiones y traspasos, primero al River Plate argentino (que pagó 500.000 euros por su préstamo y 2,5 millones por su compra definitiva) y luego al CSKA de Moscú (300.000 euros y 3 millones). Todas esas operaciones fueron detectadas y ofrecían un valor aproximado de 38.700 euros, pues la FIFA determina que el 5% del referido mecanismo de solidaridad debe ser repartido entre los clubes que formaron al jugador con diferentes porcentajes según la edad. Así, de los 12 a los 15 años se otorga a cada temporada un 0,25 %, mientras que desde los 16 años en adelante pasa a ser del 0,5%, que es el que se llevaría de nuevo el Sevilla FC se si concreta ahora su regreso a Suramérica.
Tras cambiar de equipo en Rusia y firmar por el Dinamo de Moscú en el verano de 2023 a cambio de 3,5 kilos, el internacional colombiano, de 26 años, suma cuatro goles y tres asistencias en la presente temporada, llamando la atención del Palmeiras, que tiene hasta el 28 de febrero para reforzarse de cara a la Copa Libertadores y el Mundial de Clubes. Según recogen diversos medios colombianos y brasileños, el club de Sao Paulo estaría dispuesto a ofrecer 10 millones de euros por un jugador que es valorado en siete por la web especializada Transfermarkt. Una cantidad que, de concretarse, podría dejar en torno a 50.000 euros en las arcas de la entidad de Nervión. Todo suma en tiempos de crisis.