Mario Gómez3 min lecturaParecía que la tarde del viernes iba a ser una cualquiera en Almería. Se trataba del último día de la campaña de renovaciones para la próxima temporada en LaLiga Santander. Además el club indálico decidió revelar las nuevas equipaciones, las primeras bajo la firma británica Castore. Solo se supo la primera equipación indálica, con el destacado regreso de las franjas rojiblancas tras un año con las garras de Rozam, mascota del club y de Turki Al-Sheikh.
Sin embargo, donde antes hubo calma e incluso cierta alegría por la noticia de las nuevas zamarras, luego hubo tempestad y un incendio difícil de controlar en las redes sociales de la hinchada almeriense. Cuando ya cayó la noche, el Almería anunciaba que el periodo de renovaciones había sido un éxito absoluto: el 99,3% de los abonados la pasada temporada había renovado su compromiso con la UD Almería para el regreso a Primera.
Esta noticia histórica y a todas luces positiva se veía eclipsada por una noticia totalmente inesperada. El Almería decidía no sacar nuevos abonos a la venta, tal y como habían previsto al inicio de la campaña, alegando un supuesto "agravio comparativo" debido a los pocos asientos que se podrían sortear en relación a la larga lista de espera de aficionados que querían abonarse: 11.500 personas.
El club ha aducido que este número altísimo de renovaciones junto a los nuevos palcos vips vendidos, las entradas destinadas a afición visitante y los compromisos con patrocinadores e instituciones hacían imposible cumplir el porcentaje que hay que dejar a la venta al público general para cada partido, en el caso de que se realizaran nuevos abonos.
La indignación ha sido importante dentro de la hinchada indálica. El crecimiento que venía experimentando la afición de la UD Almería se había visto reflejado en esta avalancha de solicitudes para abonarse, pero se ha visto frenado en seco por una decisión que muchos de los afectados consideran "inexplicable". La dirección del profundo enfado de estos aficionados apunta en dos direcciones, aunque una es especialmente sangrante.
Muchos creen que se han realizado renovaciones bajo cuerda y, según algunos, esta podría ser la razón principal por la que el Almería no haya publicado el número exacto de abonados para la próxima temporada. Principalmente quedan señalados en esta teoría los peñistas, que habrían sido los principales beneficiados. La Federación de Peñas de la UD Almería ha emitido un comunicado rechazando rotundamente estas afirmaciones y diciendo que todas sus renovaciones han sido realizadas de forma legal.