Drama en Valencia, con Peter Lim en la sombra
El conjunto valencianista ha caído en puestos de descenso y no da muestras de poder cambiar la situación
El Villarreal ganó este sábado al Valencia en Mestalla por 0-2 en un partido que abrió Gerard Moreno desde el punto de penalti en el minuto 45, en el día en que cumplía 300 partidos con el submarino amarillo, y que redondeó Santi Comesaña en el 57'.
Esta derrota supuso el quinto partido seguido sin ganar del Valencia, que ha caído a puestos de descenso, siendo sólo peor que los valencianistas el Oviedo y el Girona. También supuso la segunda derrota consecutiva en casa, algo que no ocurría desde el tramo final de la temporada 2023/24, cuando el equipo que entrenaba Rubén Baraja aún peleaba por entrar en competición europea.
DESCONTENTO DE MESTALLA
Este sábado, durante el último tramo del partido autonómico ante el Villarreal y al acabar el mismo, una gran parte de la afición de Mestalla mostró su enfado con la plantilla y con el club.

El equipo que ahora entrena Carlos Corberán ha acumulado dos derrotas como local seguidas y suma nueve puntos en estas primeras diez jornadas, en las que ha perdido cinco encuentros, mientras sólo ha sido capaz de ganar dos, ambos precisamente en Mestalla, ante el Getafe y el Athletic Club.
La afición de Mestalla ha sido clave para superar los malos momentos a los que se ha acostumbrado el equipo en los últimos tiempos, consiguiendo salvaciones apretadas, pero este año la paciencia parece haberse agotado.
PETER LIM, NO AYUDA
Culpar a una sola persona no siempre es justo, pero en el caso del Valencia el culpable tiene nombre y apellidos: Peter Lim. El magnate de Singapur está a miles de kilómetros de la capital del Turia, guardando un silencio institucional que enerva a los valencianistas, que ven cómo Lim ha terminado llevando al pozo al equipo. Otra temporada más, la gestión es nefasta y prácticamente inexistente, con unos fichajes que no han servido como refuerzo y Lim añadiendo registros negativos a su paso por el club. A esto hay que sumar que las soluciones que Corberán encontró la temporada pasada este año no existen. El técnico de Cheste no da con la tecla que el equipo necesita, careciendo de un plan y de ideas.
La afición no puede más, con un hartazgo que es total. Se suele decir que el amor duele, y eso es lo que le ocurre a la afición valencianista, a la que ir a Mestalla le parte el corazón, viendo cómo está su equipo.