Antonio José Medina3 min lectura”A ver si mañana podemos conseguir algún punto", decía Fernando Alonso sobre sus esperanzas en el Gran Premio de Miami de F1. Lo peor es que esa expectativa la tenía para su compañero Lance Stroll, que sale undécimo en la parrilla, porque él, saliendo el 15º, no quiere hacerse ilusiones.
El rendimiento de su Aston Martin no ha sido buen en toda la Clasificación. Ya acabó 15º, al límite, en la Q1 y repitió posición en la Q2. Podría decirse que no daba para más, pero la realidad es que la diferencia entre ser 15 y estar delante estaba en dos o tres décimas y esas han sido las que no encontró el asturiano.
"Con dos décimas puedes ser P8 o P15, estamos en el lado equivocado de ese grupo, como hemos estado en el lado bueno en las últimas carreras, ya sabes, cuando fuimos P5 en Japón o P3 en China, fue completamente inesperado. Así que sí, un día duro", admite el español, quien explica cómo fue la estrategia de Aston Martin en el peor sábado de lo que llevamos de Mundial.
"Hemos hecho algunos cambios entre la sesión y la crono, pero no han sido los adecuados y no podemos hacer nada ya. Probablemente no funcionaron como esperábamos, fueron un paso atrás y somos un poco menos competitivos de lo normal. Creíamos que era un poco mejor salir con neumáticos usados después de una vuelta por la mañana camino a la parrilla, porque creíamos que sería mejor. No hay tiempo en un fin de semana sprint suficiente para probar todas estas cosas. El otro coche salió con nuevos, yo con los usados, intentando que alguno de los dos pudiera pasar a Q3 y no lo hemos podido hacer ninguno de los dos. A ver si mañana podemos coger algún punto sobre todo con Lance, que está a las puertas de ello, y salvar un poco el fin de semana, que de momento está siendo muy complicado. Supongo que será una carrera difícil y habrá que aprender", reflejaba el español.
Fernando Alonso, quien asumía que siendo "P15 en la Q1 y P15 en la Q2, no tenía mucho espacio de mejora hoy", explicó un problema que, según parecía por las imágenes, le había lastrado en su último intento de vuelta rápida. "Estaba subvirando mucho en alta velocidad y sobrevirando mucho en baja velocidad y me sentí como si no hubiera agarre en el coche en ninguna de las tandas. Como he dicho, no sólo en la Q2, también en la Q1 tuve problemas y acabé en 15º. Ha sido una sesión muy dura", refrendaba el asturiano.