Las dos caras de Williams

La temporada de Williams se está viviendo con dos caras muy diferenciadas, reflejando la complejidad de un año lleno de altibajos para el equipo británico. Por un lado, Carlos Sainz atraviesa un 2025 complicado: entre la mala suerte y la falta de resultados, el madrileño solo ha sumado 16 puntos en las primeras 16 carreras, colocándose 18º en el Mundial de Pilotos. Esto marca su peor campaña desde su debut en Fórmula 1 en 2015, un año que para él se ha convertido en un auténtico desafío, con errores propios, incidentes en pista y decisiones estratégicas que no le han favorecido.

Albon renace en Monza

Mientras tanto, al otro lado del garaje, Alex Albon ha mostrado un renacer sorprendente, devolviendo la confianza a Williams. Tras un quinto puesto en Zandvoort y una notable séptima posición en Monza —logrando remontar desde la 14ª posición de salida en una carrera en la que los puntos estaban muy disputados—, el tailandés acumula 70 puntos y ocupa la séptima plaza del Mundial de Pilotos, superando por cuatro puntos a Kimi Antonelli. Gracias a su rendimiento constante, Williams mantiene la quinta posición en el Mundial de Constructores con 86 puntos, justo por delante de Aston Martin, que suma 62.

Albon destacó la carrera en Monza como “uno de los mejores domingos del año” y resaltó la consistencia y el ritmo del FW47: “Hicimos una estrategia fantástica y el coche tuvo un gran ritmo. Sobre el papel parecía una carrera complicada, pero fuimos el primer coche con el neumático duro cuando todos los demás entraron en boxes. No fue una carrera fácil, pero el coche fue muy agradable de conducir. Una gran remontada tras un sábado difícil”, explicó el piloto.

FW47, clave en la consistencia del equipo

El FW47 ha demostrado que, pese a algunas dificultades en clasificación, puede rendir de manera consistente y permitir que Williams luche por posiciones clave en el Mundial. Albon añadió: “Esto demuestra que tenemos un coche consistente, y eso ha sido uno de nuestros objetivos tanto el año pasado como este. Incluso cuando los sábados son complicados, volvemos a sumar puntos. Seguiré así, lo estoy disfrutando y trataré de luchar contra Kimi hasta Abu Dhabi”.

Mientras Albon mantiene una línea ascendente y demuestra su capacidad de aprovechar cada oportunidad, la situación de Sainz sigue siendo preocupante. El piloto español deberá encontrar un cambio de rumbo en lo que resta de temporada si quiere mejorar su posición y evitar que este 2025 se convierta en uno de los más complicados de su carrera. El contraste entre ambos pilotos deja claro que Williams puede competir y sumar puntos importantes cuando su monoplaza funciona correctamente, y que la constancia de Albon es clave para mantener al equipo en la lucha por la quinta posición del Mundial de Constructores.

Con este rendimiento, Williams refuerza la importancia de la estabilidad y la fiabilidad del FW47, y se prepara para afrontar las últimas carreras de la temporada con la esperanza de consolidar sus logros y mejorar aún más la posición de Albon en el Mundial, mientras Sainz busca recuperar terreno y sacar todo el potencial de su monoplaza.