El plan secreto de Aston Martin que Alonso ya conoce

Aston Martin atraviesa una temporada de altibajos que ni Fernando Alonso ha podido maquillar del todo. El bicampeón enlazó ocho grandes premios sin sumar un solo punto, hasta que las últimas mejoras en el AMR25 dieron un pequeño respiro al equipo verde. En Hungría, Alonso fue 5º y Lance Stroll 7º, sumando 16 puntos que colocaron a la escudería sexta en el Mundial de Constructores, a 18 de un sorprendente Williams y consiguiendo el mejor resultado de la temporada hasta el momento.

Pese a este alivio, en Silverstone nadie esconde su insatisfacción. El verdadero objetivo está en 2026, año en el que entrará en vigor el nuevo reglamento y donde Aston Martin quiere dar el gran salto. Para ello contará con la asociación con Honda y, sobre todo, con la incorporación de Adrian Newey, leyenda viva de la aerodinámica de la F1, con el que pretende construir un monoplaza que permita a sus pilotos pelear por victorias.

La ausencia que pesa

Andy Cowell, CEO del equipo, reconoce abiertamente que si Newey hubiera estado centrado en el coche de este año, los resultados serían mucho mejores. Pero la decisión estratégica es clara: invertir todos los esfuerzos en el AMR26.

“Si desde el 1 de marzo Adrián hubiera puesto todo su esfuerzo en mejorar el coche de 2025, estoy absolutamente seguro de que hoy estaríamos más arriba”, confesó Cowell a RN365. “Pero preferimos enfocarnos en el futuro. No estamos contentos después de las clasificaciones y carreras, pero tenemos claro dónde queremos llegar”.

Alonso espera su bala de plata

Fernando Alonso, que a sus 44 años busca volver a pelear por podios y victorias, ve en Newey la última gran esperanza de su carrera. El asturiano reconoce que el AMR25 nunca ha sido la prioridad para el diseñador británico desde su llegada.

“Le hemos insistido un poco, incluso empujado para que mire el coche, pero está centrado en el próximo año”, explicó Alonso. “Es increíble verle trabajar y pensar en problemas que quizá lleguen seis o siete carreras después. Tiene su propio método… y se nota que no ha tocado el coche de este año”.

Con la mirada puesta en 2026, Aston Martin asume un presente irregular para apostar todo al futuro. El reto: que el AMR26 sea el coche que devuelva a Alonso y al equipo verde a lo más alto. Para ello tiene nada más y nada menos que al ingeniero más laureado de la historia de la Fórmula 1 con todos los sentidos puestos en hacer el mejor coche posible.