Los hermanos Márquez firman un acuerdo para que haya fiesta en Japón

Son muchas coincidencias ya para no pensar en que los hermanos Márquez lo tienen todo apalabrado para decidir cuándo se celebra el noveno título de Marc. Y en su derecho están. En primer lugar, porque les corre la misma sangre por las venas. Y, en segundo lugar, porque se han ganado durante el curso la posibilidad de hacer todas las cuentas necesarias en esta recta final para no salir perjudicado ninguno de los dos. Porque no hay que olvidar que el menor de ellos se juega el subcampeonato.

El primer capítulo sospechoso se dio en Montmeló, donde, pese a que Álex Márquez partía como uno de los favoritos por las características del trazado, se pudo ver a un Marc más conservador de lo habitual. Y de haber ganado podría haberse ganado el derecho a cerrar el campeonato en Misano, tierra de Valentino Rossi. Sin embargo, fue el piloto de Gresini el que salió triunfador en su tierra.

Y ahora que Marc ya ha manifestado su deseo de ponerle la guinda a su temporada en tierras japonesas, Álex ha fallado en la Práctica oficial por primera vez en toda la temporada y no se ha clasificado directamente para la Q2. Y, antes, en los primeros libres, había firmado el decimocuarto mejor tiempo. Un tanto raro.

Y por si todo esto fuese poco, Marc ha recalcado cuál será su prioridad este fin de semana: "Si tengo que elegir, prefiero ser campeón aquí en Japón terminando el cuarto que esperar en Indonesia para tratar de ganar la carrera. El lunes nadie se acuerda del ganador. Quiero cerrar el título lo antes posible. Mi lucha este fin de semana no es por la carrera, sino por el título. La vida son prioridades, y la mía ahora es el campeonato". O dicho de otra forma, su única obsesión será sacarle tres puntos más a su hermano, que es el único que podría quitar el título ya y que son los que necesita para sellarlo matemáticamente.

Mientras tanto, Alex Márquez ha justificado así su primer día en Motegi: "No ha sido un día bueno, por supuesto, hemos tenido muchos problemas. Es verdad que por la tarde, cuando estaba muy atrás, he decidido quedarme con los neumáticos que tenía, no meter el blando como mucha gente ha hecho, para entender y solucionar problemas. Pero es verdad que luego la caída ha tenido algo bueno, es que he cogido la otra moto y hay que acabar de entender las dos posiciones, un poco de diferencia entre una moto y la otra, hay que acabar de entender un poco la situación".

Pese a todos esos contratiempos, se ha mostrado optimista para las dos pruebas puntuables: "Creo que todo el mundo está un poco perdido en términos de sensaciones, porque de golpe vas rápido, de golpe te cuesta, entonces es difícil, pero bien, al final el primer time attack ha sido bueno, el segundo tuvimos un poquito la mala suerte, no de nuestro lado, porque había banderas amarillas y luego vino el cuarto intento, pero nada, al final a la Q1, pues mira, será la primera vez este año y me lo cojo como tener 15 minutos más para entender mejor las cosas, entonces será una buena oportunidad para mejorar".