Pedro Acosta pone patas arriba KTM
El murciano ha liderado la reacción de la marca austríaca con una racha de podios que devuelve la confianza al equipo

Tras un inicio de curso lleno de dudas, KTM ha encontrado en Pedro Acosta el punto de apoyo que necesitaba para levantar la temporada. El piloto murciano, en su primer año en la categoría reina, se ha convertido en el gran referente de la marca en los últimos Grandes Premios. Sus resultados, junto a los destellos de Brad Binder y Enea Bastianini, han permitido al fabricante austríaco dejar atrás la crisis y mirar con optimismo a la segunda mitad de campaña.
Un inicio con demasiados tropiezos
El arranque de temporada fue complicado para KTM. Las cuatro motos sufrían para entrar entre los diez primeros y la falta de competitividad en las jornadas de clasificación lastraba cualquier opción real en carrera. Solo en Qatar apareció un rayo de esperanza, cuando Maverick Viñales cruzó la meta en segunda posición en Losail, aunque fue descalificado por incumplir la presión mínima de neumáticos. A partir de ahí, los resultados volvieron a ser discretos y la progresión parecía estancada.

Acosta marca el camino
El Gran Premio de Aragón supuso un punto de inflexión. Pedro Acosta dio un paso al frente y se mantuvo en la pelea por las primeras posiciones junto a Binder. Aunque el sudafricano acabó en el suelo, quedó claro que la RC16 había dado un salto adelante. En Brno, el murciano firmó su primer gran resultado en MotoGP al subir al podio, y además volvió a repetir en la carrera al sprint.
Desde entonces, la dinámica no ha dejado de crecer. En el Red Bull Ring y en Balaton Park, Acosta volvió a subir al cajón, confirmando que su adaptación es meteórica. “Hemos hecho una progresión sólida desde Brno y no queremos ponernos expectativas, pero estamos trabajando en la dirección correcta. Tenemos que estar contentos porque hemos mejorado mucho”, declaró el ‘37’ a MotoGP.com.
KTM vuelve a creer
Las sensaciones dentro del box han cambiado por completo. Brad Binder reconocía tras el Gran Premio de Hungría que “los últimos tres Grandes Premios han sido los mejores de la temporada”, destacando que la moto vuelve a sentirse competitiva. También Pol Espargaró, sustituto temporal de Viñales, señalaba que el trabajo en la sombra con el equipo de pruebas ha dado frutos y que el ambiente dentro de KTM es ahora mucho más positivo.
La nota amarga la pone Maverick Viñales, que sufrió una lesión en el hombro en Sachsenring y se ha perdido precisamente los fines de semana en los que KTM ha dado un paso adelante. El de Roses intentó reaparecer en Austria, pero no pudo completar el Gran Premio. Su regreso podría producirse en Montmeló, donde la marca espera recuperar su alineación completa.
Con un Acosta en estado de gracia y una moto que empieza a responder, KTM afronta la segunda mitad de la temporada con la vista puesta en consolidarse como alternativa real a Ducati y Aprilia. El murciano, en su año de debut, ya se ha convertido en el líder inesperado de un proyecto que busca renacer con él como bandera.