El aviso contundente de Márquez

Marc Márquez volvió a demostrar en Hungría que sigue siendo el gran dominador del Mundial. Con su 23º triunfo en las últimas 28 carreras y su séptimo doblete consecutivo, el piloto español disfruta de una ventaja de 175 puntos que refuerza su autoridad en MotoGP. Sin embargo, pese a vivir en lo más alto, el de Cervera mantiene la vista en lo que ocurre más abajo y se mostró encantado con los éxitos de David Alonso y Máximo Quiles.

En declaraciones posteriores a su victoria, Márquez fue preguntado por la irrupción de Pedro Acosta y otros jóvenes talentos, pero no dudó en ampliar el foco hacia las categorías inferiores. “Tenemos cantera en España, que es lo verdaderamente importante”, subrayó, antes de felicitar al colombiano de origen madrileño David Alonso, que logró su primera victoria, y al alicantino Máximo Quiles, que consiguió la segunda.

Márquez elogia a la nueva generación

Márquez, que mantiene una relación cercana con ambos, se mostró especialmente feliz por cómo afrontan las carreras. “Mola cuando ves a un David Alonso o a un Máximo Quiles con el punto de inconsciencia de un ‘rookie’”, afirmó entre risas, destacando la agresividad y frescura que les caracteriza.

Sobre Alonso, el piloto del Gresini recordó que le pidió consejo para el trazado húngaro, aunque no siempre los resultados acompañan: “Le di consejos en la clasificación que no le salieron muy bien, así que el domingo no le dije nada. Fue un ‘menos es más’. Y este fin de semana Máximo iba volando, así que no le hacía falta ningún consejo”.

La remontada de David Alonso, especialmente, le trajo recuerdos personales. “Me ha recordado a mi primera victoria en Moto2 en Le Mans, cuando venía desde atrás, remontando y atacando. Eso es lo bonito”, aseguró Márquez, que reconoció haberse sentido identificado con el estilo del colombiano.

Quiles y Alonso, en el radar

Más allá de los halagos puntuales, el ocho veces campeón del mundo quiso remarcar que tanto Alonso como Quiles forman parte de una hornada que viene pisando fuerte junto a nombres como Acosta, Aldeguer o Bezzecchi. “Si David continúa como hasta ahora, en año y medio tendrá la oportunidad de ir a la marca que quiera”, advirtió.

Con este reconocimiento, Márquez demuestra que, pese a estar centrado en su propia lucha por la historia, sigue muy pendiente de quienes vienen empujando desde abajo. Para él, el futuro del motociclismo ya tiene nombre y apellidos.