La suerte sonríe a Álex Márquez en Brno

Álex Márquez se fue al suelo en la práctica en Brno, sin embargo, tuvo suerte y gracias a su rapidez fue capaz de llegar al box del Gresini y coger la segunda moto para conseguir pasar a la Q2 en su último intento

La suerte sonríe a Álex Márquez en Brno
Álex Márquez en el GP de la República Checa 2025 en Brno - Cordon Press

El Mundial de MotoGP está casi decidido cuando se ha disputado la primera mitad de la temporada, o al menos eso se puede sacar en claro al ver que Marc Márquez le saca más de dos grandes premios completos a su hermano Álex, el único que le sigue el paso desde la distancia a 83 puntos, por los 147 sobre Pecco Bagnaia, es decir, casi 4 citas mundialistas. Pero volviendo al pequeño de los de Cervera, es la gran sorpresa del curso a lomos de la Ducati GP24 del Gresini, con la que ha conseguido ganar carreras y estar cerca de la leyenda. Y es que ha dado un gran salto como piloto, tanto que se lo está creyendo y hace cosas que en su carrera no le hemos visto.

El ejemplo claro ha llegado en Brno, donde sigue corriendo con la lesión en la mano que se hizo en Assen, pero que ya en Sachsenring no le impidió subir al segundo escalón del podio. En el trazado checo este viernes hizo una hazaña de mucho nivel, cuando entre condiciones muy complicadas por la lluvia, se fue al suelo. Apenas quedaban siete minutos de sesión y parecía destinado a pasar por la Q1, pero no. Álex se levantó muy rápido, volvió al box y salió con la segunda moto, con la que consiguió el noveno tiempo y el pase.

Tras su hazaña no le quedó otra que confirmar que las buenas sensaciones solo traen grandes pasos como este, que sin la confianza que posee serían mucho más difíciles. "Cuando salen bien, estas cosas son chulas". Aunque no esconde que no debería cometer errores que le manden al suelo, primero porque puede acabar lesionado y segundo, porque está en plena lucha por los puestos de honor de la clasificación general.

Un casi 'robo' al padre de Pecco Bagnaia

Cuando se fue al suelo el tiempo iba en su contra, tanto que necesitaba coger la primera scooter que viera con tal de llegar a boxes, y la que encontró fue la del padre de Pecco Bagnaia, su gran rival por la segunda plaza mundialista, y ahí se lo pensó dos veces y no lo hizo, buscando una segunda opción que llegó pronto. Un comisario que pasaba por ahí fue la 'víctima' y se quedó en tierra, pues el 73 se fue solo y gracias a eso recortó los minutos necesarios para poder marcar el tiempo en su último intento.