Estadio Deportivo4 min lecturaEl entrenador del Real Valladolid, Sergio González, advirtió este jueves sobre el peligro del próximo rival del equipo, un Leganés que "va creciendo y encontrando estabilidad y que está realizando mucho mejor juego de lo que reflejan los resultados", de ahí que prevea un partido "muy competido".
La humildad y las ganas de cambiar la dinámica deben ser las premisas para la plantilla blanquivioleta, que quiere volver a recuperar las buenas sensaciones que se han debilitado en los últimos encuentros y hallar de nuevo la senda de la victoria, para lo cual será necesario aplicar intensidad al juego.
A Sergio González no le preocupa la falta de goles ni llevar cuatro partidos sin ganar, pero sí que la gente "se vaya un poco de la realidad", porque el nivel de exigencia hacia el equipo es alto y "se tiende hacia lo negativo cuando llegan rachas menos propicias, dejando lo bueno a un lado, que es lo que se debe potenciar".
En este sentido, señaló que el Real Valladolid "debe mirar hacia sí mismo" y tener claros los esquemas en cada partido, ya que se aplican matices según el rival que hay enfrente, por lo que considera necesario "dar un paso más de cara a recuperar la fortaleza" que saben que tienen.
Aunque no quiere dar pistas al Leganés, el técnico catalán dejó claro que "la gente que está jugando, lo está haciendo bien, pero también lo están haciendo bien los que entran después y, por tanto, existen varias opciones y podría producirse alguna modificación para hacer frente al juego del rival". Un juego que, según analizó, "pasa por presionar arriba, ya que robando balones se encuentran muy cómodos, por buscar profundidad en el juego de ataque y espacios para sus dos puntas, con un esquema que está hallando un equilibrio y una estabilidad, aunque es cierto que es un equipo camaleónico, que cuenta con varias alternativas".
El hecho de que el Leganés sea el peor visitante de la categoría a González le dice que "un día va a dejar de serlo" y, si bien espera que eso no se produzca en el estadio José Zorrilla, también es consciente de que "no va a ser un rival fácil", sino que ve "un duelo bonito", en el que el acierto y la tranquilidad para generar acciones serán determinantes.
Y aunque se trate de un "rival directo" en la lucha por la permanencia, será "un partido igual que el resto, con tres puntos en juego, con las ganas de ganar para dejar atrás esa dinámica un poco más negativa, de que la gente se vaya contenta a casa y de sumar 20 puntos que aportarían más tranquilidad al equipo".
El VAR volvió a salir a colación en la rueda de prensa de Sergio González, quien aclaró que éste es "una buena herramienta para certificar si una situación es correcta o no", pero "si se utiliza para ver las jugadas en todos los campos con el mismo rasero y bajo los mismos criterios".