El Sevilla retoma la Liga este sábado (18:30 horas) en El Alcoraz ante el Huesca, el único conjunto de Primera división que aún no conoce la victoria. Un dato que no merma la habitual precaución de
Julen Lopetegui, que ha avisado de lo duro que será llevarse los tres puntos de la capital altoaragonesa.
La
principal preocupación del técnico vasco está en el lateral zurdo
. A la lesión de Escudero, que estará de baja en torno a diez semanas por la luxación en su codo izquierdo de la que será operado este lunes,
se suma la baja definitiva de Marcos Acuña, que no se ha recuperado a tiempo de las molestias musculares que sufrió la pasada jornada ante el Celta.
A esta “ley de Murphy”, como él mismo la ha definido, Lopetegui tendrá que responder con las escasas alternativas que le brinda su plantel. De un lado,
está la posibilidad de que sea Rekik el elegido, como ya sucediera en la segunda mitad ante el Krasnodar, pero el habitual central holandés no parece el jugador idóneo para aportar la proyección ofensiva que el técnico sevillista le pide a sus laterales, de ahí que
cobre fuerza la opción de ver a Ocampos de nuevo como carrilero, esta vez en el costado contrario.
Esta opción llevaría a Lopetegui a insistir en
un esquema de tres centrales, una suerte de 3-5-2, con un segundo punta por detrás de De Jong, como hizo Munir en Rusia, que gozaría de libertad. En esta ocasión, podría ser
En-Nesyri el elegido para esa función, otra de las posibles novedades en