Davidovich no puede con el campeón y el tenis español dice adiós a París
Alexander Zverev sigue decidido a revalidar su título de campeón en el Masters 1000 de París y su última víctima ha sido Alejando Davidovich, el último español que quedaba en el cuadro

Alejandro Davidovich era la última esperanza del tenis español en el Masters 1000 de París, en el que el malagueño asumió el mando después de la sorprendente baja de Carlos Alcaraz, quién cayó derrotado en su debut en la competición. Pero 'Foki', a pesar del buen nivel que estaba demostrando, no ha podido ante el gran reto que tenía por delante.
El español ha tenido que enfrentarse al vigente campeón del torneo, Alexander Zverev, y nuevamente no ha podido hacerle frente. De esta forma, el número tres del mundo se clasifica para los cuartos de final y sigue con opciones de revalidar su título, en una competición que se le da especialmente bien a pesar de la temporada tan complicada que está teniendo.
Alexander Zverev derrota a Davidovich y sigue peleando por reconquistar el título
Davidovich ha tenido mala suerte en París al tener que enfrentarse al vigente campeón de este torneo, Alexander Zverev. El alemán defiende el título y los máximos puntos, por lo que necesita conseguir un buen resultado, aspirando al título. Y por lo pronto va por buen camino. Sascha ya está clasificado para los cuartos después de derrotar al último tenista español que quedaba con opciones en el cuadro.
Desde el primer set Zverev ha empezado muy fuerte, a pesar de haberse quejado de la pista, y en el tercer juego ya pudo romperle el servicio a 'Foki' para coger ventaja. Un partido que a pesar de haber sido muy vistoso, con juegos largos, ha tenido un claro favorito. Por ello, Sascha se llevó el primer set y aunque la segunda manga estuvo más igualada, el teutón consiguió sentenciar el partido con un marcador final de 2-6 y 4-6.

Davidovich, a dormir en París tras su enganchón con el público
Una derrota que ha sido especialmente dura para Davidovich no sólo porque no ha podido superar a Zvreve como ya ha hecho en otras ocasiones durante la temporada, si no porque llega justo después de un rifirrafe con el público francés. El español ha podido jugar este partido gracias a superar a Arthur Cazaux, en un partido en el que evidentemente el público iba con el francés.
Pero la fama de los espectadores franceses nunca es buena y Davidovich tuvo que aguantar silbidos y un público muy desagradable en contra. Por ello, al ganar el encuentro mandó a dormir a los aficionados, que han aprovechado su derrota para recordarle el gesto.