Sale a la luz el verdadero problema de Sinner
Darren Cahill, entrenador del italiano, confiesa cuáles fueron los verdaderos problemas de Sinner en el Open de Australia

Jannik Sinner volvió a coronarse en el Open de Australia, conquistando el título por segunda vez consecutiva y dejando claro por qué es el número uno. Pero sorprendentemente se encontró más problemas de los esperados en su camino en Melbourne. Al italiano le costó mucho sentenciar algunos partidos, cediendo un par de sets en su camino, aunque siendo capaz de sobreponerse a los problemas para alcanzar la victoria.
Pero sin ninguna duda su partido más difícil fue contra Holger Rune, quién le venció en segundo set para tratar de buscar una remontada que nunca pudo completar. El danés fue capaz de poner contra las cuerdas a Sinner, a pesar de que no quedase reflejado en el marcador final, en el que el italiano se impuso por 6-3, 3-6, 6-3 y 6-2.
Sin embargo, en este partido el número uno de la ATP tuvo que hacer frente a varios problemas. Además de la presión de Rune, los problemas físicos también quisieron entrar en escena. Se vio a Sinner con temblores y dolores, por los que tuvo que ser atendido para seguir compitiendo. Una ayuda por la que Rune desató la polémica al dejar caer que se podría tratar de un nuevo caso de dopaje del italiano y que ahora el entrenador de Sinner explica.
Cahill explica los verdaderos problemas de Sinner en el Open de Australia
Darren Cahill no ha dudado en salir en defensa de su pupilo, con el que sólo le queda una temporada por disputar en el tenis antes de su retirada, y explicar a qué se debieron estos temblores en el partido de los octavos del Open de Australia. El entrenador de Jannik ha asegurado que el italiano tenía un virus que le debilitó y por el que casi se pierde el partido.
"Estaba fatal. No sabíamos si iba a poder salir a la pista de lo mal que se encontraba. Canceló su entrenamiento y creo recordar que tenía el partido programado para las 14:30, con las temperaturas más altas del día. Reservamos una pista para calentar por la mañana y después retrasamos la sesión para el mediodía, pero cuando salió a la pista estaba blanco como una sábana" explicó el ex tenista australiano.
"Tuvo un poco de suerte, porque estábamos ya en mitad del tercer set y le pudieron atender los médicos. Fuera de la pista le tomaron la temperatura y las constantes vitales. Creo que pasaron como diez minutos y cuando volvió, pasó a nuestro lado y pudimos ver que el color de su cara había cambiado un poco" añadió Cahill, explicando cuál fue el verdadero problema de Sinner y desmintiendo las acusaciones de Rune.