Sinner pone el broche a la carrera de Djokovic

Al serbio se le escapa, quizás, su última oportunidad para ganar un Grand Slam más con el que poder cerrar su exitosa trayectoria deportiva

Sinner pone el broche a la carrera de Djokovic
Djokovic felicita a Sinner por su victoria en Wimbledon. - @Wimbledon

No hay más ciego que el no quiere ver. Y son muchos los que se empeñan en ver a Djokovic levantar un Grand Slam más antes de colgar su raqueta. Pero lo cierto es que, mientras estén Carlos Alcaraz y Jannik Sinner en el circuito, al serbio le va a resultar prácticamente imposible conseguirlo.

Una vez más, el balcánico intentó dar lo mejor de sí en Wimbledon, pero cuando se topó con el número uno del mundo se le apagaron las luces. Su peligrosa caída ante Cobolli a última hora ha dejado la duda de si, finalmente, ha jugado las 'semis' tocado o no. Pero de no haberse producido la misma, las opciones de pasar a la final hubiesen sido las mismas.

Tampoco jugó Sinner en su plenitud física tras arrastrar problemas en un codo durante gran parte de este 'Major'. Y el transalpino solventó esta primera 'final' por la vía rápida y sin dar muchas esperanzas a 'Nole'. Sólo en el tercer set le dio alas, pero se las cortó en cuanto pudo.

Djokovic bordeó la retirada en varios momentos del partido, se movió de forma deficiente e hizo gestos de impotencia y de malestar, mientras su familia, comandada por su mujer y su hijo Stefan, miraba preocupada desde la grada.

Porque el serbio ya se tuvo que retirar en Melbourne, allí por una rotura muscular ante Alexander Zverev en la semifinal, perdió en Roland Garros, claramente superado por Sinner, y aquí tampoco pudo competir en la antesala de un trofeo que ha ganado en siete ocasiones y que parecía ser su mejor oportunidad para lograr el 25, igualar los ocho entorchados aquí de Roger Federer y de paso desempatar por fin con Margaret Court, poseedora de 24 Grand Slams.

Esta vez, evitó la retirada e incluso hizo un atisbo de remontada, poniéndose 0-3 con ventaja en el tercero, pero fue imposible.

Con cada derrota de 'Nole' se abren más interrogantes respecto a su continuidad en el circuito, porque cada vez es más notable que, si bien sigue pudiendo ganar a la clase media-alta, los mejores, es decir, Alcaraz y sobre todo Sinner, son casi intocables para él.

Y si Djokovic no puede con los mejores y no puede alzar más Grand Slams, a sus 38 años tiene que responder la incómoda pregunta de si merece la pena seguir intentándolo y competir por el camino por títulos menores y de los que ya se ha empachado durante toda su carrera.

Sin duda alguna, una derrota contra el actual número uno del mundo y en las semifinales de Wimbledon sería un broche inmejorable a estas alturas para el serbio.

Sinner, por su parte, revivirá este domingo la final de Roland Garros. Con muchas cuentas pendientes. El italiano ha perdido sus cinco últimos duelos ante Alcaraz y su último triunfo data de Pekín 2023. Aquí, eso sí, le ganó en su último choque, en el ya lejano 2022, cuando le ganó en octavos de final en cuatro sets.